Las grandes citas festivas del año han caído como piezas de dominó víctimas de la pandemia y de las medidas de seguridad para evitar contagios. La Feria de Albacete, de Interés Turístico Internacional, no iba a ser menos y este año no habrá celebraciones.
Sin duda, esta triste circunstancia tendrá consecuencias económicas. Artemio Pérez, presidente de FEDA, estimó que se perderán «3.500 empleos, la ciudad dejará de ingresar 86,5 millones de euros, y cientos de empresas de sectores como hostelería y comercio tendrán que echar el cierre». Destacó «el valor del asociacionismo empresarial es esencial para superar estos tiempos tan difíciles» y señaló que a «falta de Feria hay que feriarse en el comercio local». Dijo que la de 2020 «está fuera de lo común», aunque hubo ferias «en las que influyó la caída de actividad como la de 2008». Con todo a favor, sin crisis, con dos fines de semana y sin lluvias, el volumen de negocio que se genera en estos días de septiembre «es de unos 100 millones de euros», añadió. «Pero ese umbral puede quedarse en unos 58 millones, si las condiciones no son las mejores». «Este año será cero», aseguró el presidente de FEDA quien subrayó que las previsiones apuntaban a que podría «haber generado este año unos 86,5 millones de euros, en circunstancias normales».
Resaltó que este hecho afectará a cerca de 1.300 empresas con licencias de IAE que se benefician de la Feria. Estimó que la ocupación de la previsión de ocupación de las 2.400 plazas hoteleras reflejaban unos ingresos de cuatro millones de euros aproximadamente y dijo que FEDA había estimado que «el sector del comercio se habría visto favorecido con unos ingresos de unos nueve millones de euros con unas visitas de más de dos millones de personas». «La Feria Taurina -dijo- habría movido cerca de 4,5 millones de euros», y el consumo que se habría generado en el Recinto Ferial, carpas, restauración, etcétera, habría supuesto «unos 52 millones de euros este año». Otros gastos, como transporte, taxis, combustible y otros servicios, habrían generado un volumen de negocio cercano a los tres millones de euros, según el estudio de FEDA.
Artemio Pérez consideró que «difícilmente las empresas podrán resistir, si tras un primer semestre malo, el segundo comienza con muy mal pie» y vio muy complicado que puedan recuperar actividad entre dos o tres centenares de las afectadas. «Hostelería y comercio son los que más van a sufrir -dijo- el Covid-19». Añadió que la Feria da empleo a unas 3.500 personas durante este mes y en esta ocasión «seguirá creciendo el desempleo, como no lo salve la vendimia».