Soliss FS Talavera: Iker, Asensio, Sergio, Juanma y Manu Cebrián. También jugaron Caamaño, Pepe, Blecua, Buitre, Peli, Andrés y Anass.
Barça B: Dirul, Dani Fernández, Jesús Sancho, Campàs y Víctor Pérez. También jugaron Álex García, Ortas, David Peña, Jorge, Iker y Cerón.
Árbitros: Barrilero Mohedano y Leiva Martínez (Comité andaluz). Amonestaron con tarjeta amarilla a los jugadores locales Asensio, Buitre, Anass y Peli y a los visitantes David Peña y Cerón.
Goles: 1-0 Manu Cebrián (min. 2). 1-1 Jorge (min. 12). 2-1 Anass (min. 25). 2-2 David Peña, de penalti (min. 29). 2-3 Jorge (min. 33). 2-4 Jorge (min. 35). 3-4 Asensio (min. 40). 4-4 Asensio (min. 40).
Primero de Mayo. 300 espectadores.
Dos goles de Asensio en los últimos 32 segundos sirvieron para rescatar un punto ante el Barça B en el cierre de la temporada (4-4). El Primero de Mayo aprovechó la cita para brindar una calurosa despedida a Sergio, que cuelga las botas tras 18 campañas como profesional, y al técnico Rubén Barrios, que finaliza su vínculo con el club. Ambos fueron manteados al término del encuentro. El cuadro talaverano no pudo adelantar al conjunto culé en la tabla y cerró el curso en la séptima plaza.
Con Iker bajo los palos, el Talavera salió al partido con una marcha más y no tardó en generar ocasiones. En el primer minuto, Manu Cebrián lanzó fuera tras quedarse solo frente al portero; Campàs contestó en otra acción similar, pero su disparo raso se marchó pegado al palo. Los compases iniciales, eléctricos, se frenaron por un duro golpe sufrido por Asensio que obligó al cierre madrileño a abandonar la pista durante unos compases. Una volea alta de Juanma fue el último aviso de los anfitriones antes de marcar el 1-0: en el minuto dos, Manu Cebrián aprovechó un robo para plantarse mano a mano con Dirul y batir al meta catalán por debajo de las piernas. El tanto dejó noqueado al conjunto azulgrana, ayer de rosa, que pudo encajar el segundo instantes después. Con Dirul vendido, Dani Fernández salvó in extremis el doblete del omnipresente Manu Cebrián. Xavi Closas no dudó en parar el choque ante el escaso orden mostrado por sus pupilos.
El tiempo muerto pareció sentarle bien al Barça B, que pudo empatar en un golpeo de David Peña. Anass, con otro tiro durísimo, volvió a poner en apuros a un Dirul más exigido que de costumbre. Iker López no quiso ser menos y respondió ante una internada de Iker Fernández, primero, y un disparo de Dani Fernández, después. El filial culé subió su línea de presión, circuló más rápido la pelota y, poco a poco, consiguió encontrar huecos en la defensa del cuadro local. En el minuto once, Iker detuvo una doble ocasión de Jorge, que culminó la acción de tacón; el cancerbero achicó el espacio y desvió el cuero con el pecho. La dinámica del duelo había cambiado. En el doce, el equipo catalán selló el 1-1: Jorge recibió un saque de banda en el interior del área y ajustó al palo su remate, imposible para Iker. Solo el poste, que rechazó un lanzamiento de Campàs tras recibir un pase elevado, y el propio Iker, al taponar una llegada franca de Campàs, evitaron que el Barça B afrontase el descanso en ventaja. En el Talavera, Peli gozó de las dos últimas oportunidades del primer tiempo: primero no llegó a remachar por centímetros un centro de Anass y después se estrelló con Dirul. En el intermedio, plantilla y afición se unieron para rendir un sentido homenaje a Sergio en su adiós al fútbol sala.
El segundo acto siguió un guion similar: la ausencia de objetivos en ambos equipos deparó un duelo abierto y de llegadas constantes. Después de otra gran parada de Iker López ante Ortas, el Soliss se puso por delante: Anass, tras una jugada trenzada entre Cebrián y Juanma, remató solo en el segundo palo y estableció el 2-1. El conjunto barcelonés, mermado por ausencias de la talla de Rufino, no tiró la toalla e insistió en busca de la igualada. Los colegiados no dudaron en señalar como penalti una mano de Asensio a remate de Dani Fernández; David Peña, con sangre fría, convirtió el lanzamiento pese a que Iker López adivinó sus intenciones. El correcalles en el que se convirtió el partido propició que llegasen oportunidades claras por ambos bandos. Dirul y el larguero abortaron la diana de Asensio superada la media hora; en la portería contraria, Jorge dejó el detallazo de la noche con un brillante tanto de tacón para firmar el 2-3. Solo dos minutos después, en el 35, el mismo Jorge puso tierra de por medio en el luminoso al transformar una nueva acción de estrategia: recibió libre de marca un córner y llevó su disparo al fondo de la red. Asensio recortó diferencias a falta de 32 segundos y, sobre la bocina, firmó el definitivo 4-4 a pase de Sergio. Fue el broche de oro a una noche emotiva, especial y de difícil olvido, en especial para dos hombres, el jugador pinteño y Rubén Barrios, que ya forman parte de la historia de la entidad.