La concejala Susana Hernández del Mazo, portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Talavera hasta hace apenas dos semanas, ha anunciado su baja definitiva de Ciudadanos, así como su marcha del Grupo Municipal Cs Talavera, pasando a ser concejala no adscrita en el Pleno municipal. Así lo ha anunciado esta mañana en redes sociales después de verse relegada como líder de la agrupación en Talavera por el que era el número 2, Sergio Delgado, nuevo portavoz desde el 29 de julio.

El número 2 hasta entonces del partido naranja subió un escalón para «dar un nuevo impulso al papel de la formación» en la ciudad, dijeron. Hernández, que entonces dijo acatar la decisión «con respeto», ha presentado hoy la baja del partido de Arrimadas, con un comunicado en el que muestra su «disconformidad con la decisión adoptada de forma unilateral y de todo punto objetivamente injustificada» del cambio de portavoz, «por tomarse notoriamente en represalia a mi reiterada recriminación interna de falta de implicación y dedicación por parte del resto de concejales del Grupo Ciudadanos y otra serie de disfunciones internas que venían impidiendo el correcto ejercicio de la actividad política municipal para la que fuimos elegidos».

La mala sintonía entre los tres concejales del Grupo Municipal era un secreto a voces. Al parecer, Hernández, Delgado y Miguel Ruiz, el número 3, no tenían la mejor relación para trabajar juntos, y eso se ha visto ahora reflejado en el escrito de la ya ex compañera. En él, indica que en numerosas ocasiones les había reiterado un «comportamiento fuera de lo normal» como su no presencia a actos institucionales, la ausencia de implicación evidenciada en falta de propuestas y aportaciones políticas a la actividad municipal e incluso la desidia en la lectura de la información que llegaba a través del correo corporativo, «falta de lectura que intenté ‘compensar’ dando instrucciones expresas a personal del Ayuntamiento para que directamente las notificaciones les llegasen a sus teléfonos personales y no hubiese «excusas» de inasistencia por falta de información», dice.

Por todo ello, cree «incomprensible» que ante las actuaciones de impulso interno de la formación en el ámbito local y de mejorar la coordinación de la actividad política municipal, «se responda finalmente cesándome del puesto».

No adscrita. Así, y tras abandonar Ciudadanos abandona  igualmente «en coherencia» el Grupo Municipal para integrarme como concejal no adscrita manteniendo el acta «por ser mi derecho reconocido constitucionalmente, y consciente de mi compromiso con los electores que depositaron también en mí su confianza, pretendiendo continuar mi labor y el referido compromiso desde mi pertenencia a la Corporación Municipal».

Hernández recuerda que fue ella quien lideró la candidatura a las elecciones y quien adquirió un compromiso con los electores que va más allá de las siglas políticas, asegurando que aún tiene mucho que aportar a la ciudad, y considerando que ningún derecho tienen los dirigentes de la formación naranja «a reprochar esta decisión de permanecer como concejal en aplicación del código ético interno, al haber sido transgredido el mismo –precisamente- por los ex compañeros de Grupo Municipal y por determinados responsables de Ciudadanos, con su silencio cómplice, al permitir los comportamientos y actitudes de todo punto irregulares, y no actuar con contundencia para su resolución».

La ya exconcejala de Cs recuerda que Delgado y Ruiz han expresado su decisión de «darle un nuevo rumbo» a la actividad municipal, por lo que confía en que «la nueva motivación que otorga la media liberación, cumplan con el compromiso que adquirieron con sus votantes».

Hernández ha preferido no hacer declaraciones y se remite a las palabras expuestas en este comunicado.