Las autoridades chinas han declarado este domingo el estado de emergencia en el centro del país por el posible desbordamiento del río Huai, uno de los afluentes del gran río Yangtsé, debido a las lluvias torrenciales en la región.

El Yangtsé, el río más importante de China y el más largo de Asia, se desbordó el pasado sábado por segunda vez este año, hasta el punto de que las autoridades tuvieron que vaciar parcialmente la inmensa presa de las Tres Gargantas después de que las aguas del embalse crecieran hasta 15 metros por encima del límite permitido.

Si bien la presa pudo contener alrededor del 45 por ciento de las aguas, las provincias a lo largo del Yangtze y sus afluentes continúan bajo amenaza por las lluvias y las correspondientes inundaciones que han matado a 141 personas y afectado a más de 37 millones desde principios de junio en todo el país.

La provincia de Anhui, en la cuenca del Yangtsé y Huái, emitió este sábado una llamada de emergencia de nivel 1 ante el peligro de que hasta tres millones de personas resultaran afectadas por las fuertes lluvias.

Mientras tanto, en la gran metrópolis de Chongqing, unas 21.500 personas han sido evacuadas durante el fin de semana y once han fallecido por los desbordamientos, según las cifras recogidas por la agencia oficial de noticias china Xinhua.