Vecinos y trabajadores de Hacienda, en alerta

Adolfo de Mingo
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El conjunto situado sobre el pórtico de acceso al edificio, obra del escultor Mariano Salvatierra, está perdiendo los elementos metálicos del escudo de su fundador, el cardenal Lorenzana

Vecinos y trabajadores de Hacienda, en alerta - Foto: Yolanda Lancha

Las redes sociales han mostrado estos últimos días su preocupación por el estado del grupo escultórico que remata el Hospital de Nuestra Señora de la Visitación (Nuncio Nuevo), actual sede de la Consejería de Hacienda. Algunos usuarios han alertado, concretamente, de la caída de parte de los elementos metálicos que componen el capelo y los cordones del escudo arzobispal del cardenal Lorenzana, patrocinador de este edificio a finales del siglo XVIII. 

No es la primera vez que el estado del grupo escultórico preocupa a los vecinos y -muy especialmente- a los trabajadores de la consejería que atraviesan este acceso cada día, ya que hace algún tiempo se desprendió un pedazo de moldura. El elemento central, el escudo del prelado sostenido por una pareja de angelotes tenantes, se encuentra además rajado de arriba a abajo desde hace años, tal vez por el impacto de un rayo.

Por este motivo reclaman a la Junta de Comunidades que tome cartas en el asunto e inspeccione el conjunto escultórico antes de que la caída de nuevos fragmentos pueda provocar un accidente, aparte de ser responsables con las propias necesidades de conservación del monumento. Hace algún tiempo sucedió algo similar con la zona superior de la fachada principal de la antigua Universidad de Toledo (Edificio Lorenzana), donde comenzó a crecer una rama de higuera de ciertas dimensiones cerca del conjunto de esculturas, más complejo y de dimensiones mucho mayores, que remata este otro edificio. Hoy este ramaje -que prendió de manera casi milagrosa entre las molduras de la cornisa, que son de granito- se encuentra ya seco, pero aún no ha sido retirado.

Los dos grupos escultóricos, ambos realizados en la última década del siglo XVIII, fueron trazados por el arquitecto Ignacio Haan, académico de San Fernando. El del Hospital del Nuncio, más sencillo en su tamaño y ejecución, fue realizado por el escultor catedralicio Mariano Salvatierra. Hace algunas décadas, el taller de Béjar hizo una réplica destinada al Hostal del Cardenal, en donde permanece. Con respecto al grupo de la Universidad de Toledo, formado por el escudo del cardenal Lorenzana entre dos alegorías femeninas, la Gloria y la Fama (tocando su clarín), fue obra del escultor piamontés José Antonio Finazer y cuenta entre sus referentes más cercanos con el conjunto situado en el acceso de la Real Aduana de Madrid (actual Ministerio de Hacienda), inspirado a su vez en modelos romanos de Gian Lorenzo Bernini.

Aparte de su diferencia de escala y complejidad, el grupo del Hospital del Nuncio conserva aún el capelo y los cordones arzobispales metálicos que en el otro han desaparecido. Es posible que se perdieran hace dos siglos, al comenzar el Trienio Liberal, cuando el gobernador civil instó al rector de la Universidad de Toledo a retirar los símbolos alusivos a la dignidad de Lorenzana como inquisidor mayor (la rama de olivo y la espada, de las cuales han sobrevivido algunos restos). Sea como fuere, queda en manos de los responsables de la Consejería de Hacienda y la propia Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha el garantizar su estabilidad para que el deterioro no siga adelante.