Jesús Fuentes

ÁNGULOS INVERTIDOS

Jesús Fuentes


Georradar

19/05/2023

El georradar son uno o varios instrumentos  que sirven para  descubrir lo que se encuentra oculto  bajo la tierra o bajo el agua. Es una radiografía, de mayor o menos precisión, dependiendo de lo evolucionado de los aparatos y las interpretaciones de los técnicos. A la zona de la denominada Vaga Baja se aplicó esta técnica dos veces. En el año 2008 y en el año 2020. Que en el año 2023, tres años después, un diario local haya publicado los resultados de la última prospección entra dentro de las leyendas que atesora la ciudad que las prefiere en lugar de la Historia y la Lógica. Los indicios descubiertos hablan de Historia y cuentan historias. Unas historias que, por otra parte, se sabían desde hace tiempo, pero que algunos se empeñaron y se empeñan en negar con una ceguera pervertidamente sospechosa. Como resumió alguien, en un arrebato de inteligencia máxima, unos cuantos ladrillos y unas cuantas piedras  que dificultan la construcción de bloques de viviendas, centros comerciales imaginarios, etc., para los habitantes de Toledo. El pasado corroído contra un presente cutre, pero muy ventajoso para quienes continúan los modelos urbanísticos del desarrollismo de la dictadura.  
En tres páginas de La Tribuna se concentra la información sobre  los vestigios que se conservan en ese espacio tan deseado para la edificación. De hecho en el transcurso de  la evolución urbanística de ese territorio, el espacio fue atacado desde distintos puntos con objetivos aparentemente nobles. Como el caballo de Troya que los griegos construyeron en honor de uno de sus dioses. En un lugar se plantó un colegio de religiosas para impartir educación a las niñas de la sociedad toledana. ¿Cómo oponerse a tan noble misión?  En otro punto se construyó una iglesia. Y en otro distinto un colegio, este público.  Religión y educación una ofensiva imbatible.  Y un poco más allá, las instalaciones de una Consejería. Y así, con la avanzadilla de impulsos nobles se podrían ir colando impulsos no tan nobles. En el espacio, librado de milagro de tan espléndidos proyectos de construcción, es donde se ha aplicado el georradar. Y ha aparecido las huellas intuidas de la ciudad de los visigodos. Otra escaramuza  entre el pasado y el presente. Y del futuro de la zona escribiremos, según el desarrollo de los acontecimientos.

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