Conocer mejor al vino, es como conocer mejor a nuestros semejantes, aunque también es verdad, que las personas mal pensadas, y no las ingenuas como yo, dicen que nunca se conoce a al prójimo, ni aún estando casados siempre habrá cosas que sorprendan y peor aún, que nunca se hubiese nadie imaginado tal situación o acción, de quien esta más cercano a ti durante toda tu vida.
Bien, pues en el vino es lo mismo, seguro que algo de lo que yo estoy aquí compartiendo, a alguien le perece que es totalmente sorprendente, no por el conocimiento de ello, sino por todo lo contrario, que es algo que esta en total equivocación y confusión, por ello, si es así me gustaría poder saber donde esta mi error, y así poder reformarme, para no confundir a la generalidad de las personas. Pues aún a sabiendas de estar en este inestable espacio de conocimiento quizá laxo del vino, proseguiré ahora con la maduración ya de las uvas en los racimos, colgando de las vides, ocurriendo esto, desde mediados de verano (finales de junio principios de Julio), a inicios de otoño (desde final de agosto a mediados de septiembre). Este periodo es el de la maduración de las uvas, y es el tiempo donde determina la calidad de la cosecha.
El tiempo de la maduración de las uvas y en esta fase del año tan concreta, tiene una importancia capital, dado que la uva está aumentando continuamente de tamaño, a la vez que va perdiendo la mucha acidez que tenía hasta ese momento y por medio de la luz y el calor del sol, junto al torrente de la savia, la uva va acumulando cada vez más azúcares. La cantidad de azúcar en las uvas es la que determina la cantidad de alcohol que posteriormente tendrá el vino de esas uvas, cuando sea que se decida su recogida o vendimia. Y como todo el mundo ya puede imaginar, de alguna manera es te periodo de maduración de la fruta, también es donde se determina la calidad posible que se pueda obtener, en los futuros vinos que salgan de ellas. Tal punto límite de calidad, con los factores de color y cantidad de acidez y azucares, determinados durante la evolución de este proceso, es cuando se determina el momento clave, para hacer la vendimia, siendo en extremo delicado y de una grave responsabilidad, dado que tal acción, determinará la línea de los vinos en el mercado.