Ignacio Ruiz

Cabalito

Ignacio Ruiz


Déjennos vivir

08/09/2021

Desde hace muchos años el debate sobre la despoblación continuada del casco histórico toledano no deja de ser un tema recurrente según temporadas.
Se ha opinado desde todos los puntos, pero, a los residentes, a los que viven allí, les preguntan poco y se manipula mucho, en perjuicio de todos los que conforman el barrio: residentes, empresarios, proveedores y turistas.
A los que se dedican al comercio, en un barrio que atraía a tantos miles de personas, lo siguen pasando mal, porque los alquileres son de los que afectan en seco las cuentas bancarias y el aforo sigue restringido.
A los que viven del turismo en una ciudad Patrimonio de la Humanidad les queda mucho para poder empezar a recuperar el ritmo, y cuando lo consigan, aún tendrán que estar pagando deudas de estos últimos meses y los que nos quedan para delante.
A los residentes nos tienen abandonados en el cuidado de las calles (bueno, así están todos los barrios), se nos limita el aparcamiento, se limita la movilidad dentro del barrio y, ahora, además, nos van a restringir los accesos y salidas del casco histórico. Quieren hacer un nuevo barrio ratonera, como Santa María Benquerencia, una entrada y una salida: embudo seguro.
Afecta además a los proveedores de productos y servicios, no sólo para comerciantes, sino para los propios residentes. Es una absoluta vergüenza que, todas las mañanas, los autónomos que van pillados de horario y de dinero, tengan que hacer cola en la puerta de la policía local para subir a arreglar una tubería, una lavadora o llevar o traer un paquete. Si quieren limitar háganlo en todos los barrios, o adecúen zonas para acceso libre todo el día, porque ¡los residentes viven 24/7!
Déjennos vivir como en cualquier otro barrio. Poder movernos para aparcar prohibido por el paniaguado Perezagua. Dejen que puedan venir a arreglarnos el teléfono o el escape de agua de un baño, o que nos traigan un mueble. No pedimos rarezas.
Lo mejor es que dicen que Toledo va para ciudad inteligente: para obtener una licencia de obras tardan 3 meses; para pedir permiso aparcamiento de residente, 1 semana, al menos, y todas las mañanas los autónomos perdiendo tiempo en la puerta del cuartelillo para que Del Pino aparente que tiene autoridad.