Roberto García Laredo

Tribuna de opinión

Roberto García Laredo


Carlos, una historia ligada a Toledo

09/07/2021

Corría el año 1517 cuando el joven Carlos desembarcó, literalmente, en costas españolas para tomar las riendas de las coronas de Castilla y Aragón, que legítimamente su abuelo, un viejo conocido en la península y allende fronteras, Fernando el Católico, traspasó a sus descendientes en concepto de herencia– no sin antes pagar el correspondiente impuestazo de sucesiones, ya en el medievo.
Su llegada al trono no fue precisamente un camino de rosas. Aún no se había producido la coronación del infante, cuando sectores vinculados a la corte regente se encargaron de embarrar el proceso entre los nobles y, a su vez, se extendiese también al resto de la población. Un sinfín de contiendas a las que tuvo que enfrentar, con éxito rotundo, y a la historia me remito. Carlos era un hombre de diálogo, carismático y tremendamente resolutivo. Un líder.
Tan sólo dos años después, tras recibir sus últimas posesiones territoriales por parte de su abuelo Maximiliano y ser designado rey de los romanos, Carlos eligió Toledo como capital del Sacro Imperio. La ciudad que, simultáneamente, sirvió de cuna para los comuneros a los que enfrentó y que este año cumplen su 500 aniversario, el emperador Carlos con inteligencia, tesón y servicio público convirtió en el centro industrial, comercial y humano de todo el imperio. Siempre respetando la tradición de su pueblo al que con tanto orgullo defendió y dirigió. Cabe mencionar que en éste ‘no se ponía el sol’. Toledo como centro neurálgico del planeta, se dice pronto y fácil.
Cinco siglos después nos encontramos de nuevo en Toledo, muy cambiado en casi todos los aspectos de aquella capital imperial, pero intacta en el alma y gran parte de su patrimonio. Y, también, con un nuevo Carlos, sin linaje real ni herencias dinásticas, pero sin ninguna duda con una capacidad asombrosa de trabajo, de liderazgo y de sacrificio por sus ideas. Él es Carlos Velázquez, candidato y futuro presidente del PP de Toledo.
El Carlos de este siglo también tendrá que sortear peligros y enfrentar batallas. El camino del éxito es arduo, espinoso y con pocas simplicidades. Pero quién dijo que lo bueno fuera fácil o que lo complejo no aporta recompensas. Por lo pronto, cuenta con un ejército irreductible de hombres y mujeres, afiliados y simpatizantes, jóvenes y mayores, dispuestos a morir en el campo de batalla defendiendo hasta la extenuación sus ideas, nuestros postulados, un proyecto común.
Carlos Velázquez ya ha hecho su primera conquista, que es la del corazón de aquellos que formamos parte del partido popular de la provincial de Toledo. Carlos ha logrado generar una ilusión desbordante en todos los rincones que componen esta rica tierra que antes fuera la de Cervantes, Garcilaso, El Greco o Bécquer. Desde estas líneas y humildemente quién lo firma, estoy completamente seguro en afirma que no veía a tantas personas, en tan poco tiempo, con tantísimas ganas de formar parte de un equipo ganador y sin pedir absolutamente nada a cambio.
Querido Carlos tu imperio te espera. Aquí, tu legión dispuesta a salir a la calle para reconquistar los territorios perdidos en combate. La libertad es nuestra bandera y España nuestro anhelo. Precisamente en libertad pedimos que elijas a tus mejores consejeros para crear una corte unida, sabia y que te proteja. No estás sólo. Cuento contigo.