Miguel Ángel Flores

Amboades

Miguel Ángel Flores


¿De la borrachera a la abstemia?

06/01/2020

El vino no solo es beber y quizá, por un exceso de su consumo como consecuencia luego es emborracharse, el vino es mucho más, pero con mayúsculas. En el rigor del producto el vino hace muchas más cosas diferentes, y que en apariencia no están unidas al sector del vino y por tanto estas cosas son sin borracheras. Los axiomas vino-borracho, es lo que han hecho que éste (el vino) haya perdido su sitio, y si a este axioma se le añade, en España al vino el apellido de La Mancha, de Utiel, de Requena, de Jumilla, de Méntrida, de Cariñena, de Toro, de Extremadura o de Cebreros. Encima, el ser ‘borracho es de una vulgaridad supina’ por lo de esta falsa identidad secular, pero ¡qué bien!, lo hacen las compañías de otros productos, (que contienen mucho más alcohol), que en pancartas publicitarias incluso en las carreteras ponen mensajes subliminales, no haciendo promoción directa del consumo de las mismas, sino a nivel recordatorio, para que se quede esa imagen de alguien elegante, viajero, descubridor, aventurero, seductor, sexy, etc. y sin embargo en el sector del vino aún, siendo incluso a nivel nacional de España que difícil es, encontrar una respuesta que pueda competir con esas otras compañías, dedicadas al sector de las bebidas alcohólicas.
Dado que la mayoría de los productores de vino en España, que son miles (más de 15.000 marcas de vino en toda España), lo tienen muy complicado por los costos de las estructuras de publicidad. Por ello y otras cosas, se crearon hace muchos años los Consejos Reguladores para el sector del Vino, en distintas áreas de España, haciendo que unos pocos hicieran algo en común para que fuere un mucho. Pero, yo ciertamente después de muchos años, pienso que el mercado interior del vino de España no solo no se ha promocionado, si no que está en completa disminución, y la promoción que se hace es de una manera muy sesgada, y muy poco definida. Siendo hoy día la percepción del público en general, que quien bebe vino se emborracha, es decir que quien bebe vino es un borracho, y quien no lo bebe quizá sea un abstemio. Pero aviso importante, es mejor no fiarse de quien no bebe nada de vino y beba solo agua, porque ser abstemios no es ser buenas personas al cien por cien.