Juan Ignacio de Mesa

Barrio de Santo Tomé

Juan Ignacio de Mesa


Alberto

03/04/2023

He visitado la sala donde se expone la obra de Alberto Sánchez en el antiguo Convento de Santa Fe. Bienvenido sea que su obra vuelva a estar expuesta, pero creo que merece un más amplio espacio que el que ahora dispone. Parece que Toledo siempre tendrá una deuda con el escultor. He leído estos días bastantes cosas al respecto, pero hecho en falta recordar que fue Luis Alfredo Béjar Sacristán, quién, como concejal de Cultura de la primera Corporación Democrática, que tuve el honor de presidir, presentó una moción el 16 de abril de 1980 para hacer un homenaje a Alberto. Dicha moción fue aprobada por unanimidad (como era lo habitual en aquel momento) y se iniciaron los contactos con la viuda del escultor, Clara Sancha, y con su hijo Alcaén. Pasaron meses para tener todo preparado.
El 30 de octubre de 1982 se celebró el acto de homenaje, Clara y Alcaén vinieron a Toledo acompañados, entre otras personalidades, por Rafael Alberti. Después de la sesión plenaria en el Ayuntamiento, nos desplazamos a la calle de la Retama donde se descubrió una placa conmemorativa y se dedicó la plaza del mismo nombre al escultor. De allí seguimos al paseo de Merchán, donde se inauguró la escultura de 'la Toledana' obra de Alberto, reproducida por el también escultor toledano Cecilio Béjar.
Hubo varios detalles que quiero recordar. El primero es que Alcaén, agradeció al exgobernador civil de Toledo ,Thomas de Carranza, las gestiones que llevó a cabo para traer la obra de su padre desde Rusia a España, consiguiendo hacer la primera exposición en el Museo de Arte Contemporáneo. El segundo, fue el texto del discurso de Rafael Alberti, que, como no podía ser de otra manera, fue una pieza maravillosa de oratoria. Dicho texto me lo dedicó Alberti y hoy está depositado, como otros muchos documentos míos, en el archivo Municipal. Comimos en Venta de Aires donde Alberti recordó las muchas ocasiones que allí estuvo con los miembros de la Orden de Toledo.
Caja Toledo, entonces dirigida por Juan Molero y presidida por José Manuel Martín Chaves, hizo una tirada en resina de una pequeña pieza de Alberto. El Grupo Tolmo organizó una exposición del escultor, tanto de dibujos como de esculturas. Toledo empezaba a recuperar la memoria de quién, según Picasso «era un hombre grande nuestro Alberto». Ojalá Toledo no vuelva a dejar en el olvido a alguno de los suyos.