Juan Ignacio de Mesa

Barrio de Santo Tomé

Juan Ignacio de Mesa


Malthus

21/11/2022

La primera vez que hoy hablar de Thomas R. Malthus, debía tener 7 años. Fue en clase de enseñanza primaria y vino a colación por la explicación que nuestro maestro nos daba (no recuerdo si fue don Luis o don Adolfo), sobre el crecimiento de la población. Malthus publicó, de forma anónima, en 1798, su trabajo 'Ensayo sobre el principio de la población'. En el mismo, indicaba que la población crece en progresión geométrica, mientras que los recursos para poderla alimentar y mantener, lo hacen en progresión aritmética. Esto hacía prever que llegaría un momento en el que la población no se podría mantener y deberían tomarse decisiones traumáticas.
Frente a este pesimismo, Jean-Jacques Rousseau, íntimo amigo del padre de Malthus y que había influido en su educación, defendía que la evolución futura de la razón, la ciencia y la técnica, permitiría hacer ilimitada la capacidad de mejora de una sociedad formada por hombres buenos y libres unidos bajo un contrato social. Cuando Malthus escribió su Ensayo, la población de la Tierra, ascendía a 1.000 millones. Cuando yo oigo su nombre por primera vez, era el año 1955 y la población de la tierra ascendía a 2.700 millones de personas, habiendo crecido en más de mil millones desde el año 1900, a pesar de las dos Guerras Mundiales sufridas. De entonces acá, el crecimiento ha sido exponencial. Se alcanzan 6.070 millones en el año 2.000, y hace escasos días, se ha alcanzado la cifra de 8.000 millones.
Las cifras parecen dar la razón a Malthus, el crecimiento de la población es impresionante. El crecimiento demográfico de Asia y África avanza en progresión geométrica. La cuestión es si el avance de la ciencia y de la técnica, así como el uso adecuado de los recursos, permitirá atender el incremento de consumos que este crecimiento poblacional supone. Alimentos, agua y energía son los recursos que se deben disponer. ¿Se dedica el esfuerzo suficiente para asegurar que así sea? El tiempo transcurrido desde 1798 y la diferencia poblacional en todo este periodo, indica que se han podido asegurar los recursos para atender el aumento de la población. ¿Se podrá mantener este paralelismo entre población y recursos? ¿se hará de forma correcta?

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