Pilar Cernuda

CRÓNICA PERSONAL

Pilar Cernuda

Periodista y escritora. Analista política


Hipocresía

20/06/2019

Los socialistas navarros y el nacionalista Geroa Bai han dado la presidencia del parlamento foral a Geroa Bai en una operación que contaba con el apoyo de Bildu y no pasa nada. Ojo sin embargo con permitir cualquier tipo de componenda con Vox: al que lo intente, y mucho más al que lo avale, le caerán los males del infierno.

Vox es un partido populista de extrema derecha, que cuestiona algunos de los principios básicos de la sociedad actual y con importante déficit en materia de igualdad y de solidaridad. Pero Bildu es un partido con un número destacado de miembros condenados por actividades terroristas. Sin embargo, el mismo socialismo que da a Vox el trato que se da a los apestados, no duda en contar con Bildu para el reparto de poder.

Aparte de sufrir políticos mediocres –no somos los únicos, Europa está plagado de ellos- es irritante la hipocresía con la que se mueve actualmente el mundo de la política. Todo el mundo rechaza el populismo que tanto daña las estructuras de la democracia, pero a los de extrema izquierda se les considera interlocutores para lo que haga falta mientras que a los de derechas no se les da ni agua. Esta periodista no siente la menor simpatía por Vox y le preocupa que haya alcanzado tanta representación institucional, pero hay que ser realistas: son tan nefastos para un país los populistas de derechas como los de izquierdas, y es indignante la desigualdad de trato. Tan es así, que Sánchez incluso habla de ministerios con Pablo Iglesias. Desde su entorno afirman que no se le pasa por la cabeza contar con Iglesias en su gobierno … pero habla, se reúne y negocia con él. En su ronda de conversaciones con los dirigentes de partidos parlamentarios, Abascal no fue invitado.

Se queja Colau amargamente de las descalificaciones personales que le lanzaron los independentistas tras ser reelegida alcaldesa. Gran alarde en los medios de comunicación con su cara descompuesta ¿Hubo el mismo alarde cuando hace cuatro años se insultó y agredió a los miembros del equipo de Botella –sobre todo a las mujeres- cuando salieron del ayuntamiento? Y volvemos a un asunto ya tratado semanas atrás ¿Se habría a la organización Infancia Libre de la misma manera si en lugar de estar vinculada a Podemos fuera cercana a Vox? Estamos ante toda una trama indecente de madres, abogados, médicos y psicólogos que no dudaban en acusar a padres de abusos sexuales a sus hijos para arrebatarles no ya la custodia, sino las visitas autorizadas por los jueces correspondientes.

Este país es política y socialmente hipócrita: se hace la vista gorda ante un ex terrorista indispensable para alcanzar una cuota de poder y se crucifica a quien hace la misma maniobra con un partido extremista de derechas. Da vergüenza ajena. Y, repito, esta periodista se duele de que un partido como Vox haya conseguido tantos diputados, concejales y parlamentarios autonómicos. Pero les han votado, qué le vamos a hacer…