José Manuel Patón

LA PLUMA CONTRA LA ESPADA

José Manuel Patón


Los adefesios

21/04/2021

No sé qué le pasa a este país, o mejor dicho no sé qué le pasa a la prensa y a la televisión de este país, que se olvida de los héroes en muchas ocasiones y convierte en héroes a personajillos. Suena a coña mantequera que ahora un tal Sergio Ramos, cuyas cualidades para el fútbol están más que demostradas, aparezca como un salvador de la patria o incluso como un salvador del Real Madrid, -a mi me encanta pero no es lo mismo-, en cartelitos por la calle haciéndose publicidad, cuyo objeto no podrá ser otro que le aumenten el sueldo millonario, o que le vuelvan a renovar un contrato en un club que a fin de cuentas, no representa a los españoles, sino a una parte muy entusiasta, -entre los que me incluyo cuando gana-, de los futboleros pintorescos. En España tenemos el mayor ejemplo de héroes sobresalientes históricos: unos son inventores, y los hay médicos o científicos etc., que injustamente nunca se han llevado ni una línea en la prensa ni un reportaje en la tele. Y si queremos bajar al ruedo de los deportes, tenemos a personajes legendarios, como Nadal, Mengual, Mireia Belmonte, Sergio García, Sainz, Los Márquez, Nieto, Carolina Martín, número 1 de bádminton mundial, -¡que alma de acero debe tener una persona para entrenar a bádminton hasta llegar al número 1 del mundo en un deporte desconocido para la mayoría de los lectores que se van a leer este artículo! -, Pedrosa, Crivillé, etc., -me dejo cientos-, que no salen en los medios como se hubieran merecido por su proezas, por sus heroicidades, por esas horas corriendo en un estadio solo, o en la moto, sin ver a nadie, o nadando boca abajo, -eso ya sí que es de nota-, hasta que te dicen, vale sí, ahora parece que sí, después de horas de buceo, sin ver nada más que el fondo de una piscina, o andando en un circulo como si tuvieras disípela en las caderas. Esa gente, que peldaño a peldaño, escalón a escalón, paso a paso, y latido a latido, han ido subiendo hasta la cima de su deporte, sin los grandes contratos de los futbolistas, ni las discusiones de los ultrasur, y a veces, ni un mínimo estadio de pueblo donde puedan ir a verlos, sin animadores, solo su entrenador, algunos compañeros y su familia, esos sí que son verdaderos héroes.
Pero el fútbol es tan popular que tiene eso, que con que seas un jugador de cualquier equipo de primera, de los que hay cientos de miles en el mundo, -recordemos que también se juega al fútbol en Francia, Holanda, Colombia, Brasil, Argentina, etc.-, se puede salir muchas veces en portada de la prensa especializada, y se puede ser protagonista de una M… porque diga unas palabritas que polemicen otras M…, y sobre M… más M… un equipo de locutores televisivos disfruten y pongan los pelos de punta a una peña que no hace más que oír M… más M… por M…
Confieso que me estoy volviendo un cascarrabias, pero la voracidad de la televisión por tonterías, -ya ve usted lo que ha pasado con otra memez como pueda ser cómo se ata los zapatos o se corta las uñas una tal Rociíto-, y ese olvido por lo grandioso, es lo que tiene … pues eso.