Si esperan leer una columna tipo ‘Viva la Gente’, qué disciplinados somos y qué estupendos, cómo aplaudimos todas las tardes a las ocho y así  no sigan. Escribo dando un alarido desgarrador y acuso con toda mi  fuerza al gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias; el PSOE en coalición con Podemos que no hay que olvidar que es un partido de extrema izquierda y antisistema por añadidura,  con el tal Ábalos, la personificación de la soberbia en el grupo.
Este gobierno pide a gritos desaparecer del mapa. Sánchez hizo lo imposible por enganchar la Presidencia del gobierno y lo consiguió maniobrando con politiqueo y formando el primer gabinete de coalición de la democracia española reciente y sobre todo tragando los más repugnantes y babosos sapos, pero ese poder requiere grandes responsabilidades imposibles de cumplir para  incompetentes y a la vista de cómo estamos sólo forofos de Sánchez e incondicionales de Iglesias  pueden decir que la actuación del gobierno no ha sido desacertada ni siquiera medianamente aceptable.
Digo a los izquierdistas revenidos que no son banderías políticas izquierda-derecha, se trata de la distancia  que hay entre gente capacitada para un cargo –un ministerio- o ineficaces cegados por el poder aunque no sepan hacer lo o con un canuto. O dedicados toda la vida a plagiar tesis doctorales o citas de grandes gobernantes. Sobre todo me ha sorprendido la postura ovina de muchos periodistas aceptando sin rechistar las normas sobre información dictadas por el gobierno. Aquí tengo que alabar la postura de Chani, que creo algo tiene que ver con este periódico que ha dimitido de sus trabajos La Sexta. Un hombre consecuente.
Ahora la coalición PSOE-Podemos partido de extrema izquierda, pretende apropiarse de los aplausos de todas las tardes con desvergüenza, lo que no quieren ni ver son las filas de féretros, ni los hospitales indefensos y hacen lo imposible por manipular las cifras de muertos e infectados y machacan con lo bien que lo han hecho por si algún despistado se lo cree.
No perdono la dejadez, la imprevisión y la decisión  que tomaron casi delictiva, de mandar a las masas a infectarse en las concentraciones del Día de la Mujer. No perdono por mucho que Pedro tenga la cara de roca y Pablo fauces de carnívoro. Un maño diría que son tan falsos que ni siquiera se atreven a vaticinar  la ruina que ya está aquí.
Recuerdo a Rubalcaba diciendo que España se merece un gobierno que no la mienta y Sánchez e Iglesias y su gobierno son una gran, la peor mentira.