Alejandro Bermúdez

Con los pies en el suelo

Alejandro Bermúdez


¿Serán de litio?

12/03/2021

Ni tampoco de sodio, ni de potasio, ni de ningún elemento de la tabla periódica. No serán de nada… Es que me preguntaba de qué sería la fábrica de baterías que vendría a Talavera, a modo de ‘calcio 20’, para ayudarnos a superar el raquitismo de nuestra economía.
Inocente de mí, creí que tan pronto hubiera una confluencia de astros, es decir, hubiera en España, en Castilla-La Mancha y en Talavera gobiernos socialistas comenzaría la remontada y en un abrir y cerrar de ojos se empezaría a reducir el diámetro de nuestras cabezas, y los síntomas del raquitismo económico galopante que padecemos empezarían a disimilarse terminando por desaparecer.
Sinceramente creía que los programas económicos socialistas estarían imbuidos de esa justicia distributiva que tanto predican. Realmente mi único miedo es que las baterías fueran a fabricarse en Cáceres, porque a fuer de ser justos, ellos tienen las dos materias primas: el raquitismo económico como nosotros y además el litio en su subsuelo. Si así hubiera sido me hubiera tenido que buscar otro tema para la perorata de esta semana. Desgraciadamente no me he quedado sin materia para comentar.
Es que no me digan que no es sangrante que una empresa como la proyectada de las baterías de litio se coloque allí donde la sobra de diámetro se produce en la cintura. Además sin pedirla y recibida con un desprecio, que ni el torero azteca Manuel Martínez lo interpretara mejor después de sus series de estatuarios.
Es inaudito que en este asunto, nuestro Gobierno haga lo que se ha venido haciendo a lo largo de toda nuestra historia: tratar de contentar a los separatistas con inversiones del resto de España, para que implanten industrias en las que se procese la materia prima de las regiones más pobres, con la mano de obra de estas regiones sin industria. Este caso de la fábrica de baterías es paradigmático: Cataluña no mueve un dedo para conseguir esta instalación; el Presidente del Gobierno, usando incluso a la Corona para ello, se planta en Barcelona para ofrecer la instalación de esta moderna industria; no acude nadie representativo del gobierno catalán a dar las gracias ni a recibir la dádiva. Pero nuestro gobierno, «impasible el ademán», sigue humillándose y humillando a toda España a ver si le aceptan el regalo, mientras otros suplican las migajas.
Pueden contarnos lo que quieran para justificar esta decisión, pero no existe razón alguna. Si se trata de estar cerca de la materia prima, hay lugares mucho más cercanos, porque, que sepamos, Martorel no es famoso por sus minas de litio. Pero si la justificación es la proximidad a la producción de los vehículos que serán uno de los destinatarios más importantes de las baterías, existen en España otros centros con importantes fábricas de automóviles. Por tanto, solo una política de rendición ante los separatistas puede justificar esta decisión.
El ejemplo que está dando nuestro gobierno es realmente pernicioso. Menos mal que la inmensa mayoría de los españoles, no lo siguen y aguantan todas las humillaciones de que son objeto, sin encresparse más allá de algún comentario puntual. Ahora, cuando esté en funcionamiento la nueva fábrica ‘catalana’, montada con subvenciones y materias primas de toda España, los extremeños y castellanos iremos a mendigar allí trabajo a ver si nos admiten y nos colocamos como ‘charnegos’...