Se mire por donde se mire, la caída es total, la caída que no deja de seguir hacia abajo, un abajo sin fin como si se tratase de un agujero negro con una masa gravitatoria de atracción inimaginable, y la a la cual solo unos pocos muy escogidos no son absorbidos, pero el resto si lo estamos siendo, desde todos los ángulos de lo que llaman sociedad vulnerable. Porque, por lo visto la parte más vulnerable de la sociedad, tiene tal daño que ya será irrecuperable, y seguirá así durante mucho, mucho tiempo y a ella, le sigue el siguiente escalón de la sociedad, donde en verdad nos encontramos la inmensa mayoría de supervivientes simplemente, eso supervivientes.
Esto es así, según los estamentos y entidades que se dedican a estudiar esto, porque tristemente cada vez hay más personas que tienen o mantienen estas actitudes, en su vida tanto en lo que respecta a su entorno como a su persona, dado que son las que alguna vez en su vida, han tenido una deuda respecto de su préstamo de casa, las que alguna vez en su vida cuando viene un gasto extraordinario de más de 800 euros, no son capaces de afrontarlo, son las personas que no salen porque no tienen para unas cañas con los amigos, las que no se permiten dos pares de zapatos, las que no compran ropa ni en rebajas, las que no comen carne o pescado cada dos días o una vez por semana, las que no pueden soportar la propiedad de un coche, las que no regulan la temperatura de sus hogares porque no pueden permitírselo, las que si se rompe algo fontanería, un mueble o así no lo arreglan porque no se pueden permitir.
Es decir que cualquiera, que haya tenido o tenga algunos de estos parámetros, conjugados en verdad ya esta en la corriente de la caída total, con la realidad más aplastante, que dado la situación actual es casi imposible hacer eso reversible. Y cada vez se hace más vulnerable, y así, cada vez más una creciente mayoría social, de toda edad y condición es más precaria laboralmente, siendo muy fácil por ese aspecto, entrar en alguno de estos datos anteriores.
Así, en verdad crecerá desgraciadamente, de una manera irreversible la situación de ser pobre, aun anteriormente habiendo sido incluso rico alguna vez, o simplemente empleado acomodado. Lamentable situación, pero la caída no se ha dado ahora, lleva cayendo muchos años, pero la mayoría miraba al frente, al final del precipicio, sino que daba la vuelta la cabeza para ver que antes lo tuvo un horizonte sin abismos, pero inexorablemente avanzando hacia donde no quiere mirar, la zona abisal que además no tiene retorno, lástima por esta cruel y triste situación de cada vez más personas…