Miguel Trinidad

Mano a Mano

Miguel Trinidad


El final de las rancheras

07/12/2020

Aunque se venía barruntando en los corrillos, esta semana se hará oficial, a priori, el fin de la era Berlanga en el CD Toledo. Digo a priori porque la historia reciente de esta entidad está llena de tiros al palo o de goles fantasma por lo que la cautela a la hora de informar es más que necesaria. Llegará un nuevo grupo inversor que tendrá a dos toledanos y toledanistas como cabezas visibles. El abogado Joaquín Sánchez-Garrido Juárez se perfila como presidente. Hijo del fundador del bufete y alcalde de Toledo en dos ocasiones puede aportar mucha experiencia a varias parcelas que necesita el club. Los más de doce años de experiencia como administrador  oncursal le pueden ser muy útiles para sanear una economía muy deficitaria en la actualidad. Luis Jaime Puebla, por su parte, como responsable de la parcela deportiva, dará un salto de calidad tras su dilatada experiencia en este ámbito.  
Ambos serán los encargados de dar un giro de timón para cerrar una etapa con Jorge Berlanga que comenzó de una manera muy ilusionante y finalizó con una agonía insalvable para todas las partes interesadas.
Es el momento de realizar una apuesta importante, tanto en lo económico como en lo deportivo, y recalco lo de importante porque si no, el CD Toledo volverá a la casilla de salida una vez más.
El futuro más inmediato reside en la actual temporada, con una buena plantilla que no recibía los alicientes, tanto económicos como de respaldo, que pide cualquier trabajador en su puesto de trabajo. El final de las rancheras en la entidad verde debe suponer inicialmente que las nóminas estén al día y que se produzca la salida de factores deportivos y extradeportivos que producían disonancias de buen clima en diferentes parcelas del club.
Ese es el futuro inmediato al que debe unirse la recuperación de la identidad del club, la vuelta a las buenas relaciones con las diferentes instituciones locales y regionales, y la llegada de nuevos patrocinadores. Sería una buena oportunidad para que, después de muchos años, el CD Toledo volviese a ser transparente en lo informativo y no hubiese la opacidad que ha vivido hasta el día de hoy.
Sánchez-Garrido y Puebla están ante una gran oportunidad que requerirá de mucho esfuerzo y no deben caer en los graves errores comunicativos, entre otros, de sus predecesores. El club debe dejar de ser noticia por hechos más relacionados con películas de lo absurdo que por méritos deportivos e institucionales. Hechos que podrían haber protagonizado cualquier ranchera de Chavela Vargas.