Miguel Ángel Flores

Amboades

Miguel Ángel Flores


Inmunidad

27/04/2020

Inmunidad. Según la Real Academia Española de la Lengua, nos da varios significados: Del lat. immun?tas, -?tis. 1. f. Cualidad de inmune. 2. f. Privilegio local concedido a los templos e iglesias, en virtud del cual los delincuentes que a ellas se acogían no eran castigados con pena corporal en ciertos casos. 3. f. Biol. y Med. Estado de resistencia, natural o adquirida, que poseen ciertos individuos o especies frente a determinadas acciones patógenas de microorganismos o sustancias extrañas. 4. f. Biol. y Med. Respuesta específica de un organismo a la acción de los antígenos. También la RAE añade dos aspectos más, 1º, respecto a la inmunidad diplomática: 1. f. inmunidad que gozan los representantes diplomáticos acreditados cerca de un Gobierno, sus familias y demás personal de las embajadas o legaciones que no es súbdito del país en que estas residen. Y 2º, referente a la política, dice de la inmunidad parlamentaria: 1. f. Prerrogativa de los parlamentarios, que los exime de ser detenidos o presos, procesados y juzgados sin autorización de la cámara a que pertenecen salvo en los casos que determinan las leyes.
Pues con el conocimiento más cercano, a lo que significa con mayor exactitud inmunidad, en los tiempos de esta larga pandemia, epidemia o plaga, que está afectando a casi todo el planeta, de una manera colosal. Que bien podría decirse, que vamos inevitablemente hacia el nuevo mundo que está por nacer, o quizá está naciendo y estamos viviendo (sufriendo) su parto. Por ello, ciertas inmunidades en estos tiempos no sirven de nada, para no llegar a pasar el mal en primera persona. Porque por la triste realidad que estamos viviendo, con mayor o menos medida, en función de quién esté cercano a esta nueva enfermedad, de una manera personal o de alguien de su entorno, y ella le pueda llevar inevitable y lamentablemente al destino final.
Así pues, por lo visto esto de la inmunidad, sea del rango que sea sirve de bien poco, a la hora de la verdad individual de cada uno. Aunque, siendo las últimas acepciones que se dicen, si la enfermedad toca con términos tristemente inevitables, al final toca. Por todo ello, la única inmunidad real, es dentro de lo que cabe estar en alerta, siempre en alerta cada uno consigo mismo, de una manera madura y responsable en sus acciones, pero ya se sabe muchos irresponsables se creen que siempre son inmunes a todo y así resultan las cosas…