Juan Ignacio de Mesa

Barrio de Santo Tomé

Juan Ignacio de Mesa


Expertos

27/04/2020

El mejor equipo que puede tener un político es el que cuenta con los mejores expertos en la especialidad que se tenga que tratar. Los expertos estudian, valoran, comparan escenarios y proponen. Pero al final quien toma la decisión es el político, bien en órgano colegiado o a titulo personal dentro del ordenamiento legal vigente. Llevamos semanas oyendo que todo lo que el Gobierno hace es seguir las recomendaciones de los expertos, pero la decisión ha de ser política.
No entro en cuestiones de salud e higiene para luchar contra la pandemia, no soy ‘experto’ en estas cuestiones, pero hay otros asuntos sobre los que si quisiera opinar. El cierre de empresas y la situación en la que todos estamos va a suponer la destrucción de gran parte del tejido productivo español lo que conllevará millones de puestos de trabajo perdidos, caída del PIB, reducción de ingresos del Estado por caída de la recaudación de tributos y problemas para atender el gasto público, aunque tengamos el paraguas europeo de unos hipotéticos coronabonos que, caso de que se emitan, habrá que devolver algún día.
Por otro lado, habrá millones de personas en estado de necesidad que habrá que procurar obtengan una renta mínima. Estamos ante un escenario que obliga a tomar una decisión ‘política. Se priorizan las medidas para evitar el cierre de empresas manteniendo el mayor número posible de puestos de trabajo o se prioriza el establecer la renta mínima universal. Una cuestión no es incompatible con la otra, pero ¿no será más sensato dar empleo que dar subsidios? El empleo da seguridad a una familia para saber que depende de ella misma.
El subsidio ¿durante cuanto tiempo se puede mantener si el Estado no tiene ingresos?  Es la elección entre dar un pescado o dar una caña y enseñar a pescar, es elegir entre que un ciudadano pueda tener la libertad de elegir donde y como trabajar o que se vea abocado a depender del Estado ‘protector’ sin obligaciones ni contrapartidas. Y esta si es una decisión política que puede derivar en un cambio de modelo de sociedad muy peligroso. España tiene que optar, credibilidad de su modelo ante Europa o hundimiento con un futuro peor para todos.