La inconsciencia general ante lo que en verdad no se ve ni se palpa, hace del éxito de las plataformas como amazon y demás. Haciendo creer al usuario que ciertamente esta ajustando su presupuesto personal en medio de un consumo, cada vez más perverso y moralmente mucho más transgresor y esclavista que tiempos atrás. Porque el trabajo que es necesario, hasta llegar el famoso paquete detrás hay una falta de ética absoluta frente a todos los trabajadores, que hacen falta hasta que el paquete llega a tu casa, eso sí, sin que tu tengas molestia alguna y así el usuario se siente muy satisfecho en su acción, porque incluso se cree el mensaje, que tal o cual cosa o aparato que ha adquirido mediante un dinero plástico, que va directamente a un paraíso fiscal, es para ayudar a quien fabrica el elemento, cuando la realidad es todo lo contrario. Tan siquiera hay que envolverla de ‘buenos engaños’, llenos de buenos propósitos, y así la masa muy consolidada en un ‘artificial’ bienestar, sigue en este avance que se cree más progre, porque al ser más joven y hacer sus acciones de consumo de esta ‘virtual manera’, incluso se ve más solidario que sus generaciones precedentes, es decir que ser joven, no significa que se es mejor.
Porque, ya se sabe que ser mejor no es ser más bueno; una cosa es mejor y otra cosa es bueno: El mejor en algo será aquel que se distingue del resto por su calidad y excelencia. Ahora veamos lo que es bueno, realmente proviene de la palabra bondad, que es la inclinación a hacer el bien. En ningún punto bueno y mejor no son ni semejantes. En concreto alguien si es un asesino, ladrón, o corrupto puede ser el mejor en eso, y por ello no es bueno, tan solo es bueno en el trabajo que esta haciendo y solo eso, da beneficio primero a él, y solo a quienes les pueda beneficiar tal acción que él ejecute. Lo que ocurre que como tales acciones cada vez se están maquillando más, en las apariencias externas se están normalizando hacia esta nueva forma ‘perversa’ de vida, como que todo es mejor que el pasado, solo por ser nuevo. Pues el resultado ya se está comprobando, un caos, y el caos es en puridad maldad, es decir que la siliconalización de la sociedad, para nada es la panacea de la vida, más bien es todo lo contrario.