No entiendo el escándalo. El escándalo es dar el poder a personas como las que lo ostentan en este momento. Creo que más que mirar a los gobernantes, tenemos mirar alrededor, porque alrededor tenemos a los verdaderos autores del resultado.
La democracia tiene estas cosas y como tales hay que asumirlas. Es hora de destapar las cartas y no esconderse en excusas como que han engañado al pueblo o sandeces similares. El personaje que nos gobierna, si tiene alguna fibra de honradez, es que nos ha enseñado bien clara su condición y, si conociéndolo lo hemos votado, no nos escandalicemos de las consecuencias.
¿De verdad le ha extrañado a alguien que haya nombrado fiscal general de Estado a una señora que brinda por las cloacas? Nuestro presidente puede ser muchas cosas, menos inocente y ¿Qué quieren, que ponga un fiscal que luego se querelle contra él en cuanto “escriba otra tesis”? La fiscal elegida, como casi todo lo que está nombrando, salvo lo que tiene que enseñar fuera, está a juego con él y sus socios, no va a nombrar gente seria y mucho menos íntegra. ¿Alguien piensa que si su vicepresidente fuera una persona mínimamente consecuente se iba a tragar el nombramiento de la fiscal después de lo que ha dicho de ella? Necesita personas maleables, que sean capaces de conjugar   su fervor proletario con tener mayordomo y ‘nurse’.
Lo peor es que esto es solo el comienzo, porque España seguirá ‘madurando’, es decir, nuestra realidad se parecerá cada vez más a la Venezuela de Maduro ¿Exagero? Pues en el Parlamento Europeo los apoyadores del presidente han votado a favor de Maduro cuando el Parlamento sancionaba el intento de golpe de estado en Venezuela, y fíjense que ya la propuesta era inocente: «intento de golpe de Estado»… ¿Y cómo son los golpes consumados? Pues ni aun siendo casi una broma, el acuerdo lo han votado los independentistas.
La normas democráticas están hechas para que conforme a ellas, se conduzca un demócrata honrado y con vergüenza. Cuando estas normas quieren sujetar a una persona cuya única moral es el poder, se convierten en frágiles telas de araña, que no consiguen más que dejar alguna tenue señal en el traje del dictador. Porque las Normas están construidas con palabras y las palabras, con un mínimo de habilidad se las hace significar lo contrario de lo que quisieron decir cuando las escribieron. Porque la interpretación de su significado la hace quien tiene el poder.
Pero, si no estamos ciegos, el golpe de estado ha empezado ya ¿Qué otra  cosa es que un órgano del Estado adopte una resolución, como en el caso de la inhabilitación de Torra, y ni el Presidente del Gobierno ni ninguna institución del Estado la hagan el más mínimo caso? Si esto no es una transgresión del orden, es porque no queda orden. Porque la excusa estúpida de que una norma dice una cosa y otra dice otra distinta, pasa muchas veces, pero eso está perfectamente resuelto en el derecho en base, en primer lugar, al rango de las normas, no todas valen lo mismo, y en si hay un rango igual, en base a la antigüedad, de tal forma que la más moderna deroga la más antigua.
La realidad es que hemos elegido golpistas y ya han empezado su programa…