Ilia Galán

LA OTRA MIRADA

Ilia Galán

Poeta y filósofo


Viejos impertinentes

26/03/2023

Se movía con la torpeza propia de la mucha edad, pero la cabeza estaba en su sitio. Cuando se le preguntaba, respondía con cierta parsimonia, aunque demostraba dominio intelectual. Era yo presidente de la sección de Ciencias Sociales en el Ateneo de Madrid y le presentaba para hablar del futuro de la humanidad y el transhumanismo, con otros personajes. Ramón Tamames, el preso comunista en las cárceles franquistas, diputado por el Partido Comunista de España y uno de los más renombrados historiadores y economistas del país, real académico con muchos etc., no parecía próximo a tradicionalismos. Poco antes había presentado su último libro, La mitad del mundo que fue España. Bastante público, gran respeto al venerable intelectual. Sin embargo, pocos meses después aparecerá como un nonagenario que reprende al Gobierno socialista y pseudocomunista, junto a Vox. Algunos dijeron que la vejez había aturdido su cabeza. No me lo pareció cuando hablábamos; sorprendía por su mente despierta. Nunca logró tanta notoriedad este símbolo del radicalismo de izquierda, ahora al lado de la radical derecha. Mas no es esa la clave; ya ha gozado de numerosísimos honores, no necesitaba más protagonismo. Más bien parece uno de los muchos que temen por el futuro de nuestro país, a la deriva, en manos de un Gobierno confuso, peleando por naderías, y que está abandonando algunos de los grandes ideales de la izquierda: el reparto del capital, tribunales independientes, mientras cada vez es más difícil vivir para la mayor parte de la población, con mercados y multinacionales engulléndolo todo en esta oligarquía occidental, con apariencia de democracia... Tamames no se pasó a la derecha sino que reflexionó sobre las posibilidades reales de su país y su rumbo, no tiene miedo en decirlo, nada gana con ello, poco puede perder y el prestigio, para quien le ronda la muerte, es pequeña cosa ante ciertos deberes. Decir, criticar a quien lo hace mal, aunque con criticados compañeros de viaje.
También acaba de fallecer en Madrid con 91 el célebre escritor chileno, Jorge Edwards, nacionalizado español. Delicado, sutil fue su trato cuando nos encontrábamos. Diplomático, sirvió en el Gobierno izquierdista de Salvador Allende y publicó su célebre Persona non grata, crítico ante lo que vio cuando se desarrollaba la revolución en Cuba. Su obra, tan alabada por el Nobel Octavio Paz, fue censurada tanto por la izquierda como por la derecha, ya que decía la verdad que él viviera, más allá de los grupitos, como cuando escribió los estudios sobre Pablo Neruda. En Esclavos de la consigna señala cómo Neruda y otros enmudecían, conscientes del horror provocado por Stalin. 
Quizás necesitemos de más viejos sabios que no se callan y señalan lo que hemos de cambiar. Por eso los mayores siempre estaban en los senados y consejos: la voz de la experiencia.