Le queda un viaje. Un partido. Tres puntos más. El AD Bargas Qualery FS ha sufrido para llegar a la última jornada con opciones de continuar en Segunda B y las va a apurar en Cáceres. Ahora ya depende de sí mismo. Atrás queda la última cita en el El Balcón. Llena de nervios, tensión y un final agónico que puso a prueba el nivel de aguante de los aficionados. Y es que, Jona, vestido de portero-jugador, tuvo que aparecer a 27 segundos del final para torcer de nuevo un partido contra el Jerez Futsal que parecía cosido mediado el segundo tiempo.
No se le puede poner una coma a la primera parte cuajada por el equipo rojillo, que salió de inicio totalmente consciente de lo que tenía entre manos. Dominó el juego, acumuló llegadas y pronto vio portería. Apenas se había cumplido el cuarto minuto cuando Mario Moñi resolvió con la zurda un robo en el medio campo.
Dani Pérez rotó a su equipo pronto y quitó a los cuatro de golpe. El resultado es que otra salida rápida, esta vez conducida por Peces, propició el segundo, anotado por Lucas con su pierna derecha. El encuentro era completamente toledano. La superioridad era tal que Fidel ni siquiera tuvo que oponerse para impedir lanzamientos del rival. Prácticamente no existían.
Nervios, tensión y a tres puntos de la salvación (5-4)En otra pérdida del Jerez Futsal, Jona pudo sentenciar con el tercero. Su vaselina ante Barranca se marchó demasiado alta. El equipo extremeño se animó en el tramo final del primer periodo, pero ahí estaba un portero que lleva a sus espaldas muchos de los puntos que va a necesitar el equipo bargueño para salvarse, si al final lo consigue. Lo estaba pasando mal el Bargas FS, agobiado por las acometidas visitantes. Y apareció Peces, que recibió un pase largo que bajó al piso y colocó donde no podía llegar el guardameta. Aun así, Chichi rozó el primer susto para la parroquia local, aunque no estaba la tarde para los ánimos del Jerez.
Algo parecido sucedió en la segunda parte, quizás un poco más dividida que los primeros minutos del encuentro. Los intentos extremeños no fructificaron, hasta que tuvo que hilvanarse la jugada perfecta, con hasta seis toques milimetrados, y Santos redujo las diferencias.
Lejos de sobrevenir los nervios, los chicos de Dani Pérez, alentados por la grada, no dejaron de correr y perseguir el cuarto. Lo encontró otra vez Mario Moñi a falta de ocho minutos y medio para el final, después de un par de lanzamientos de Lucas y Piqueras, detenidos por Chato.
Pero como no hay final tranquilo en El Balcón, el Bargas FS se complicó la vida innecesariamente. Los fallos en los marcajes provocaron el 4-2 de Sergi, y ya en la recta final, jugando de cinco, Titi anotó dos goles calcados en el segundo palo. La grada se vino abajo, pero el técnico local se la jugó con Jona de cinco y el experimento salió de cine, cuando no siempre es así. El '8' marcó un 5-4 que se defendió a muerte hasta el final, para luego celebrarlo.