Desde hace lustros, la Asociación de Vecinos La Candelaria venía solicitando al Ayuntamiento la reparación del edificio que le tiene cedido en Azucaica para su sede. El mal estado de la cubierta, las humedades, el frío o los desprendimientos de cal de las paredes hacían que a la postre el inmueble estuviera infrautilizados, como mucho para alguna reunión o como almacén. De hecho, el mal estado de la construcción llegó a tal punto que el pasado mes de diciembre, cuando ya estaba preparada la intervención municipal, llegó a hundirse un falso techo.
Así lo recuerda el presidente vecinal Víctor Fernández-Jara. A finales del pasado año, el concejal Pablo García, vocal del Distrito del Casco y Azucaica, que se ha interesado mucho por la actuación, ya les había enseñado el proyecto, cuando sobrevino el hundimiento, que afortunadamente no dañó a nadie.
La obra. Apunta el edil tras la caída del falso techo que el Ayuntamiento ha querido «hacer bien la obra». De ahí la dotación al inmueble de un importante forjado «para que lógicamente, dure el mayor tiempo posible y evitar cualquier tipo de incidencia. Para que La Candelaria tenga una sede en condiciones se ha cambiado también toda la instalación eléctrica y hemos hecho una importante apuesta por la eficiencia energética, para que no haya frío, ni calor».
Se han conservado los muros del inmueble pero se ha renovado el interior. - Foto: David PérezEsta actuación de la Consejería de Obras y Servicios ha tenido un presupuesto de 40.700 euros. Fernández-Jara calcula que estará finalizada en un par de semanas. Está siendo un arreglo integral de la sede de La Candelaria, en la que lo único que se ha mantenido ha sido los muros exteriores. Encima de ellos, se ha cimentado y levantado el tejado con aislamiento térmico y también se ha renovado por completo el interior.
Hay que tener en cuenta que se trata de un edificio muy antiguo, con cubiertas sobre palos de madera. El Ayuntamiento la desmontó, para poner una cimentación de hormigón y colocar una nueva estructura y tejado. Las humedades causadas el antiguo tejado habían dejado huecas algunas partes de los muros y provocaban desprendimientos de yeso de las paredes. Para evitarlo, el Ayuntamiento ha colocado en las paredes perfiles de aluminio y una cámara de aire con pladur. También cambiará puerta y ventanas y se dotará a la infraestructura de una rampa para el acceso de personas con movilidad reducida.
La renovación de este inmueble podrá hacer posible un mayor uso por parte de la Asociación de Vecinos. Confiesa Fernández-Jara que al ser un edificio muy pequeño, no se pueden desarrollar actividades culturales. Pero sí continuará su uso como oficina y como espacio para reuniones, ahora mucho más cómodo. También permitirá su uso a otras entidades.