Representantes de la población gitana, encabezados por la Sociedad Gitana Española, han pedido que se amplíe la búsqueda del pequeño Ángel más allá del vertedero de Toledo en el que se encontró el cadáver de su primo Fernando, junto al que desapareció el pasado 10 de diciembre en el barrio madrileño de Carabanchel.

En una concentración celebrada la tarde de ayer frente al colegio Honduras del distrito de Villa de Vallecas, donde estudiaba Ángel Fernández, de 11 años, han reclamado que la Policía investigue «a fondo» las causas de la desaparición de ambos primos, así como la muerte de Fernando, de 17 años.

Juan José Cortés, cabeza visible de Sociedad Gitana Española, ha incidido en la necesidad de ampliar los «medios humanos, tecnológicos y materiales» en la búsqueda de Ángel en el vertedero Ecoparque de Toledo, donde la Policía ha rastreado durante 18 días, en los que ha revisado algo menos de la mitad de la zona acotada donde se condensan unas 10.000 toneladas de residuos.

«Hay que recordar que Ángel sigue desaparecido y hay que encontrarle con vida hasta que se demuestre lo contrario», ha remarcado Cortés, acompañado por Fernando y Ángel, los afligidos padres de ambos primos, así como de numerosos representantes de la población gitana y vecinos de Villa de Vallecas.

Cortés también ha anunciado que en breve enviarán un escrito al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en el que le pedirán que ponga a disposición de la Policía «todos los medios a su alcance, como se ha hecho en otros casos similares».

Los investigadores de la Policía Judicial de Madrid y Toledo, así como de la Unidad Central de Atención a la Familia y Mujer (UFAM), continúan centrándose en el Ecoparque de Toledo, donde se halló el cuerpo de Fernando el pasado 15 de diciembre.

«Todas las investigaciones apuntan a que el cuerpo de Ángel está en el vertedero», ha señalado este lunes la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González.

Además, la Policía Nacional mantiene varias hipótesis abiertas en torno al desenlace de la desaparición de los dos menores, que el pasado 10 de diciembre pusieron, de forma voluntaria, rumbo a Toledo, donde al parecer Fernando quería encontrarse con una chica que fue su pareja.

Sin embargo, su rastro se perdió en las inmediaciones de un centro comercial de la capital toledana, cuyas cámaras de seguridad les captaron.

A preguntas de los periodistas, Juan José Cortés ha indicado que la familia de los desaparecidos «no cree» en la hipótesis de la muerte accidental que baraja la Policía, ya que «solo hay una autopsia y un cuerpo». «Queremos saber toda la verdad», ha sentenciado.