El nuevo Plan de Adicciones quiere retrasar la edad de inicio

Luis J. Gómez
-

Entre ellas el consumo del tabaco está al alza, las adolescentes beben más alcohol y tienen más problemas de borracheras que los chicos y también les superan ya con el cannabis

El nuevo Plan de Adicciones quiere retrasar la edad de inicio - Foto: Eugenio Gutierrez Martinez

Sanidad ya tiene preparado el que será el Plan regional de Adicciones de Castilla-La Mancha de 2022 a 2025. Por ahora ha publicado un borrador con el que se hace un diagnóstico de la situación del consumo de tabaco, alcohol y otras drogas, pero también del uso de internet, los videojuegos o el juego con dinero. El Plan incluye la financiación para estos cuatro años y los objetivos que se marca Salud Pública para cada una de las adicciones que quiere atajar. Uno de los objetivos claves que se marca Sanidad es el de «retrasar la edad de inicio del consumo de drogas y otras conductas adictivas» en la población escolar. Y en el análisis de necesidades, se pone mucho el foco en las mujeres.

Tabaco

Junto con el alcohol es la droga más consumida por la población escolar y por eso debe centrar la acción preventiva. En el caso concreto del tabaco, Sanidad apunta que hay que propiciar el abandono del consumo en un amplio sector de la población adicta a esta sustancia, «con especial atención a las mujeres». Apuntan a una encuesta en la que de 2011 a 2019 el consumo de tabaco entre las mujeres sube de 29,5 al 31,5 por ciento en Castilla-La Mancha, mientras la proporción de hombres fumadores a diario ha disminuido de manera importante pasando de casi un 40 por ciento en 2017 al 33,4 por ciento en la última edición.

Alcohol

En el caso del alcohol, el Plan indica que es necesario reducir las intoxicaciones etílicas entre los escolares. Y es que más de la mitad de los adolescentes de la región se ha emborrachado alguna vez en su vida, con un porcentaje del 55,6 por ciento, que supera el 51,1 por ciento de la media nacional. En la parte positiva apunta que hay una tendencia a la baja que se observa en el consumo frecuente entre los más jóvenes, así que señala que hay que reforzar ese descenso. El consumo de alcohol entre 12 y 18 años estaba en un 84,9 por ciento en 2012, pero ha bajado a un 77,7 por ciento con dato de 2018. Eso sí, también pide hacer hincapié en las mujeres, pues entre la población escolar, las chicas son más consumidoras que los chicos y tienen los mayores porcentajes en los indicadores de consumo más problemáticos como borracheras.

Cannabis

En cuanto a las acciones orientadas a la prevención del consumo de cannabis, de nuevo el Plan de Adicciones señala que estas medidas son «especialmente importante en las mujeres, sobre todo teniendo en cuenta el aumento del policonsumo entre las escolares». Uno de cada diez jóvenes entre 15 y 24 años ha fumado cannabis en los últimos treinta días. Tradicionalmente los porcentajes en Castilla-La Mancha eran inferiores a la media, pero se han equiparado. Entre las adolescentes, ellas consumen más cannabis que ellos.

Hipnosedantes

Son un grupo de drogas que tienen efectos ansiolíticos, hipnóticos o sedantes y relajantes. Algunos son fármacos muy conocidos como el Lorazepam, Alprazolam y el Diazepam. El Plan avisa de que se está generalizando su uso contra el estrés o el insomnio, para afrontar problemas emocionales y de la vida cotidiana, priorizándose el tratamiento farmacológico sobre otras intervenciones más conductuales. El Plan de Adicciones avisa de que está habiendo un consumo «muy preocupante entre los escolares».

Juego e internet

El Plan de Adicciones urge a promover una cultura de uso adecuado de internet, «especialmente entre las mujeres, ya que uno de cada cinco adolescentes hace un uso compulsivo de internet». También insta a reforzar los mecanismos de control para evitar el acceso de los menores a los juegos de azar. Se calcula que una cuarta parte de los menores han jugado dinero alguna vez el último año, ya sea dentro o fuera de internet.

Castilla-La Mancha dedicará 31 millones hasta 2025, a una media de 7,7 cada año

El nuevo Plan regional de Adicciones viene con el presupuesto marcado. Según se recoge en el borrador, habrá 31 millones de euros hasta 2025, con una media de unos 7,7 millones de euros para cada uno de los cuatro años comprendidos en esta planificación. Incluso se especifica quién pondrá el dinero. La mayor parte corre a cargo de la Consejería de Sanidad, del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha y de la Fundación Sociosanitaria, es decir de tres entidades dependientes de la Junta. El Gobierno de España pone alrededor de un millón de euros cada año.

El borrador del Plan avisa de que el inicio de los comportamientos adictivos en edades tempranas hace necesario mantener y mejorar las interveciones en estas edades. De hecho, hay actuaciones para los años venideros que ya se están programando. Salud Pública ha sacado a licitación el programa de prevención de consumo de drogas y riesgos psicosociales para los dos próximos cursos por 210.000 euros, impuestos incluidos.

Este programa trabaja en tres ámbitos de actuación. Por un lado aborda el ámbito escolar, con guías, diseño de actividades y formación de los docentes desde la etapa Infantil hasta el Bachillerato. El objetivo es llegar al 90 por ciento de los centros de la región.

También hay una parte de trabajo en el ámbito familiar, con la realización de cursos para padres. Pero además se establece un programa específico en el ámbito de la comunidad para ayuntamientos, asociaciones o entidades sin ánimo de lucro. Se calcula que estas acciones podrían llegar a medio millón de castellano-manchegos.