Persianas bajadas en un Virgen de la Salud sin calefacción

F. J. R.
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Pacientes con ropa de abrigo y familiares en busca de mantas a última hora de la tarde de ayer tras el colapso definitivo del sistema de climatización del edificio

Persianas bajadas en un Virgen de la Salud sin calefacción - Foto: Yolanda Lancha

Al perro flaco todo se le vuelven pulgas. Si además se trata de un edificio de más de 60 años con demasiados parches a sus espaldas, la situación se vuelve dantesca. Y todo ello con una avalancha de casos de traumatología por caídas por el hielo y un fuerte repunte de lo que ya es el comienzo de la tercera oleada de la pandemia.

Ésta es la radiografía que se puede hacer tras el paso de la borrasca Filomena del hospital Virgen de la Salud, el vetusto centro de cabecera de la capital de Castilla-La Mancha que el lunes estaba plagado de goteras y sufriendo cortes intermitentes de calefacción, sobre todo en su ala norte, hasta que en la tarde de ayer se produjo el colapso definitivo del sistema de climatización de todo el edificio.

Las escenas vividas después, comentadas a La Tribuna por pacientes y personal sanitario del centro, quedarán ya para el recuerdo de situaciones lamentables. Y es que, se recomendó bajar todas las persianas del edificio para evitar tener pérdidas de calor y se obligó a los pacientes a ponerse ropa de abrigo. Además, se dio la situación de que no había mantas para todos los ingresados en el Virgen de la Salud, por lo que muchos familiares tuvieron que salir a sus domicilios a buscar mantas para poder pasar una noche en la que anticipaban temperaturas de hasta ocho grados bajo cero. Por lo menos, las mínimas fueron menos duras que en las dos jornadas anteriores, en las que tampoco funcionó la calefacción por momentos y en zonas.

A todo esto, hay que sumar las goteras que aparecieron en el hospital el lunes con el deshielo de la nieve acumulada en cubiertas y tejados.

Por todo ello, desde la plataforma Marea Blanca CLM, colectivo que defiende la sanidad pública en la región, no han dudado en pedir la dimisión del consejero de Sanidad, Jesús Fernández, y de la gerente del Sescam, Regina Leal. «¿Dónde ha estado nuestro consejero o nuestra gerente general que no han sido capaces de mostrar una mínima actitud de empatía con sus trabajadores? ¿Dónde estaban? ¿Dónde están hoy? ¿De verdad que nadie va a dimitir después de este fin de semana? ¿Nadie va a ser lo suficiente responsable para dimitir?», se preguntan desde el colectivo, que pide una reunión urgente con el presidente Emiliano García-Page.

«No podemos consentir la dejadez de las administraciones. Ya bastante tenemos con la pandemia, la tormenta Filomena y la dejación de los administradores que, hoy por hoy, ante la falta de su compromiso con la sanidad pública en la región, los trabajadores nos veamos luchando contra la  Covid-19 sin el personal suficiente, que ahora también luchamos contra las goteras y sin calefacción», afirman.