Los españoles gastaron en sus vacaciones de verano una media de 1.160 euros, un 14 por ciento más que el año pasado, con un crecimiento del 24% desde 2016, según datos del Observatorio Cetelem de gasto en verano. 

Según el informe, un 31 por ciento de los encuestados asegura haber gastado más, frente al 30 por ciento que lo declaraba en 2018, un 38 por ciento ha asegurado haber gastado lo mismo (frente al 40 por ciento de 2018), y un 31 por ciento ha afirmado que gastó menos durante los meses de verano, frente al 30 por ciento del año previo. 

Por otro lado, la intención de gasto en comparación con los años anteriores "sufre pequeñas variaciones" en términos globales. Así, un 26 por ciento ha manifestado que gastó más que el año anterior (22 por ciento en 2018). El 54 por ciento confesó que había gastado lo mismo que el año anterior, un 3 por ciento más que en 2018. Los que han asegurado que habían gastado menos fueron un 21 por ciento, frente al 28 por ciento registrado el año pasado. 

Según el informe, la diferencia entre la intención de gasto y el gasto real ha sido de un -7 por ciento en los dos últimos años, de 1.241 euros en 2018 a 1.060 euros en 2019. 

Con respecto a qué actividades se destina el gasto, el 42 por ciento manifestó que utiliza su dinero en viajes dentro del país con hotel y apartamento incluidos, frente al 26 por ciento que aseguró alojarse en casa de familiares y amigos (26 por ciento). En tercer lugar se encuentran los viajes al extranjero, con un 18 por ciento. Por su parte, el caravaning ha caído tres puntos este año, hasta el 6 por ciento. 

Las alternativas de ocio más elegidas han sido acudir a restaurantes, para un 71 por ciento de los encuestados, seguida de ir de compras (58 por ciento), ir al cine (48 por ciento) y realizar visitas culturales (25 por ciento). Acudir a un musical ha aumentado el interés de los consultados hasta el 10 por ciento, frente al 7 por ciento del año anterior.