La BNE expone dos dibujos del Tajo de hace tres siglos

L.G.E.
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En una exposición dedicada a la ingeniería civil española desde el Renacimiento hasta el siglo XIX, la Biblioteca Nacional muestra dos dibujos del Tajo a su paso por Toledo con lavanderas, pescadores, molinos y alguna ruina a medio descubrir

Puente de San Martín - Foto: BNE

La Biblioteca Nacional de España permite bajar este verano al río Tajo de hace trescientos años. En una exposición que tiene abierta desde el 22 de junio al 27 de septiembre han coincidido dos dibujos del río a su paso por Toledo del siglo XVIII, un río que incluso a través del pincel se ve con más agua y con más vida que ahora.

Estas ilustraciones forman parte de la muestra ‘Sueño e ingenio. Libros de ingeniería civil: del Renacimiento a las Luces’, comisariada por Daniel Crespo Delgado. La Biblioteca Nacional ha seleccionado tesoros del patrimonio bibliográfico de la ingeniería civil española, la que quiso transformar el país con canales, puentes, puertos o caminos, desde el Renacimiento hasta el siglo XIX.

El Puente de San Martín.

El Tajo por encima de ToledoEl Tajo por encima de Toledo - Foto: BNE

Uno de los dibujos ‘toledanos’ expuestos es el del ‘Puente de San Martín’ y es la imagen elegida para el cartel de la exposición. Es del siglo XVIII y está hecho con lápiz, grafito, pincel, tinta china y aguadas grisáceas, sobre un papel amarillento verjurado. En el mismo hay inscripción manuscrita a lápiz que indica ‘De Gonzalez Velazquez”.

El Puente de San Martín se ve mucho más bajo que en la actualidad, algo que quizá se pueda achacar al dibujante o al nivel del agua que llevaba el Tajo por entonces. También se distingue un lienzo de muralla que baja hasta el arranque del puente y hay en la orilla lavanderas y pescadores. No es difícil distinguir a una mujer sentada con un sombrero que parece estar dibujando. Quizá es la autora de este dibujo y se quiso incluir.

Los molinos.

ToletumToletum - Foto: BNE

El segundo dibujo, también del siglo XVIII se titula ‘El Tajo por encima de Toledo’ y está hecho con pincel, pluma, lápiz grafito, tinta china y aguadas grisáceas en papel agarbanzado verjurado. En este caso muestra una estampa del río en el que destacan los molinos que aprovechaban las aguas del Tajo y de los que ahora solo quedan sus ruinas. Al fondo se pueden distinguir entre las colinas algunos edificios históricos como Tavera.

Las lavanderas son de nuevo protagonistas, con los fardos de ropa a la cabeza. También han desaparecido de la estampa actual los burros y animales de carga que abundan en esta imagen. Y como curiosidad, en el extremo inferior izquierdo parece asomar una pequeña ruina, entre el suelo, un pequeño arco de ladrillos que bien podría haber formado parte de una infraestructura hidráulica romana.

El ‘Ingenio’.

El Tajo a su paso por Toledo también se puede ver en otra ilustración de esta exposición, que es bastante conocida. Es el aguafuerte de ‘Toletum’ que forma parte del volumen Civitates orbis terrarum. Liber quintus, del grabador Franz Hogenberg, una especie de atlas del mundo con vistas de ciudades. El aguafuerte que expone la Biblioteca Nacional es de 1598. Tiene marcado con una cruz dónde está ‘El Ingenio’, en alusión a la curiosidad que despertaba el artificio de Juanelo Turriano que subía el agua desde el Tajo al Alcázar. En el libro de Diego Pérez de Mesa de las ‘Grandezas y cosas notables de España’ el artilugio de Juanuelo aparecía junto a El Escorial como la edificación más admirable del reinado de Felipe II.