El Soliss Talavera ha vivido de nuevo otro aplazamiento de un partido, en este caso, por la borrasca Filomena, que le impidió viajar el sábado a Madrid para medirse a Leganés en el choque suspendido de la tercera jornada. Cuando el conjunto de Rubén Barrios empezó a encadenar encuentros, llegó el parón navideño; pensaba retomar el Campeonato el pasado sábado, pero la meteorología lo impidió. Ahora bien, como pone de relieve a este diario el capitán, Anass, en este caso, «no hemos tenido que lamentar casos de Covid»; de todos modos, es un hecho, que «esta tormenta nos ha perjudicado».

El equipo talaverano no ha tenido esta temporada la tan deseada continuidad de jornadas que le permita incrementar su ritmo de encuentros; pero no queda otra que «acostumbrarse a la nueva normalidad, intentar trabajar y no desconectar de la competición aunque no haya el fin de semana partidos; y la semana siguiente entrenar igual, como si fuésemos a jugar aunque sepamos que no vayamos a hacerlo».

Y es que los conjuntos no saben hasta finales de semana si van a poder disputar o no su partido en el caso de las pruebas de Covid; pero es que con la borrasca Filomena, el equipo talaverano conoció la casi segura suspensión la noche del viernes. Por tanto, la única receta «es estar concentrados en el partido, pensando en que vamos a jugar porque, de lo contrario, es peor para todos».

Precisamente, el rival del próximo sábado será el Leganés, pero ahora para el envite de la décima jornada que se celebrará en el Primero de Mayo a partir de las 18,00 horas. Un choque vital para los talaveranos: «Para nosotros todos los partidos son más que una final; estamos obligados a competirlos al máximo nivel y ganar todo lo que podamos porque la primera fase de la Liga se va acabando y no se nos puede alejar el objetivo».

En cuanto al adversario madrileño, el capitán indica que «no lo conocemos porque no hemos jugado todavía contra él, pero lo tenemos estudiado e intentaremos hacerlo lo mejor posible».

El Soliss Talavera ha tenido la fortuna de disputar hasta ahora todos sus partidos en el Primero de Mayo con público, pero este sábado no será así con la vuelta de la ciudad al nivel 3: «Tener afición es importante pero, además, la de Talavera es especial»; por ello, «jugar sin público va a ser complicado y este partido va a ser el primero sin nuestros aficionados».

Los talaveranos tienen todavía dos encuentros pendientes, con lo que la plantilla mantiene la esperanza de encauzar la Liga; en opinión de Anass, «hasta que no tengamos todos el mismo número de partidos jugados, no se van a ver los equipos que entren en esa segunda fase para el ‘play-off’ de ascenso». Por tanto, «tenemos que aprovechar como sea los encuentros aplazados».

En otro orden de cosas, el capitán ha destacado de la actual plantilla talaverana que «es un equipo joven, aunque hace falta siempre tener gente veterana y experta». Y además resalta que «es un grupo humano muy bueno y trabajamos cada semana como nadie, intentamos hacerlo lo mejor posible pero, de momento, no llegan los resultados». Está convencido de que «el día que empecemos a sumar, iremos para arriba y no habrá quien nos pare».

Niega que exista preocupación en la plantilla por la falta de resultados, dado que «todos estamos confiados en que lo vamos a sacar adelante». Ahora bien, reconoce que «van pasando las jornadas, no puntúas y sí te preocupa un poco porque las posibilidades son menores». Para reafirmarse en que «el equipo no está tan nervioso como podría estarlo otro conjunto en la misma situación que nosotros».

Porque la mira está puesta en el ascenso. Así lo asegura el jugador: «Nuestro objetivo es entrar en la segunda fase y una vez conseguido, con la permanencia asegurada, tendremos que ir a por todas».

Anass es de los más jóvenes  de la plantilla con tan solo 23 años; pero, a la vez, es el más veterano por temporadas cumplidas en el conjunto talaverano con un total de cinco y, por ello, es el capitán; un cargo con el que se muestra «encantado; los compañeros y el cuerpo técnico lo ponen muy fácil». En definitiva, «somos todos uno». No se imaginaba alcanzar la capitanía cuando desembarcó con 18 años en Talavera; recuerda de aquella época que «llegué en una pretemporada en la que no tenía ficha y, por tanto, no sabía si me iba a quedar o no». Al final, se incorporó al equipo y «las cosas fueron saliendo bien y la verdad es que estoy muy contento».

Los deportistas se están habituando a otra manera de entrenar y de competir después de estar semanas parados por el confinamiento. El estado de alarma llegó para el Soliss Talavera cuando iba a culminar, a buen seguro, una de las mejores temporadas de su trayectoria. Anass reconoce que todos estos meses hasta la vuelta a los entrenamientos y la competición «han sido duros porque estás todos los días del año haciendo deporte y te pararon de repente. Haces ejercicio en casa, pero no es lo mismo». Y en la vuelta a los entrenamientos y a los partidos, «empiezas un poco regular, pero todos nos estamos acostumbrando a esta nueva normalidad y seguro que volveremos a nuestro nivel».