?Mengíbar Software del Sol: Marco, Pablo Ordoñez, Tortu, Pedro Ordóñez y Miguelao -quinteto inicial-, Víctor Montes, José López, Bingyoba. Ureña y Manu Leal.
Soliss FS Talavera: Álex Pérez, Dani Montes, Rivera, Caamaño y Anass -quinteto inicial-, Rafita, Peli, Carlitos, Chendo, Rafa Luque, Buitre y Manu Cebrián.
Árbitros: Del Olmo Martínez (Comité madrileño) y Rodríguez Gonzalez (Comité tinerfeño). Mostraron tarjeta amarilla a Miguelao y al técnico, Mikel Diestro, por el Mengíbar Software del Sol, y a Buitre por el Soliss FS Talavera.
?Gol: 1-0 Bingyoba (min. 6). 1-1 Carlitos (min. 19). 2-1 Víctor Montes (min. 22). 3-1 Pablo Ordóñez (min. 31).
?Sebastián Moya Lorca. 400 espectadores
El Soliss Talavera perdió en su visita a la cancha de un rival directo como Mengíbar por 3 a 1 y desperdició una gran oportunidad de haber acabado la jornada del sábado fuera del descenso. Cayó con justicia en un partido en el que nunca estuvo cómodos ante un rival más efectivo. Este resultado deja al cuadro preparado por Juanma Marrube pendiente del encuentro que debe disputar mañana a las 12:00 horas el Leganés ante UMA Antequera. Precisa que el cuadro andaluz sume porque en caso de victoria del equipo madrileño el cuadro equipo cerámico habrá firmado su descenso de categoría. En cambio, un triunfo antequerano o un empate le permitiría al Soliss Talavera llegar con opciones de poder jugar la permanencia en la última jornada, aunque sin depender de sí mismo.
El partido arrancó con un gran respeto de parte de ambos equipos, que buscaron con descaro a sus pívots para mantener lo mas alejado posible el balón de sus porterías. En el minuto tres, el primero en avisar con cierto peligro fue el Mengíbar en un lanzamiento de falta de Bingyoba que desvió el meta, Alex Pérez. Contestó rápido el Soliss Talavera con una incorporación al ataque del cancerbero que desvió, en última instancia, Bingyoba.
Poco a poco se encontró mejor el equipo preparado por Juanma Marrube, que generó sobresaltos con un disparo lateral de Carlitos que a punto estuvo de sorprender a la zaga local. Cuando mejor estaba el Soliss Talavera, un balón en el interior del área a Bingyoba, que supo hacerse sitio para revolverse y definir con acierto, supuso el 1-0.
En el minuto siete, Dani Montes lo intentó desde un costado, pero su disparo se estrelló en el lateral de la red. Poco después, fue Pedro el que probó fortuna desde la frontal. La defensa desvió lo suficiente para evitar el gol.
Lo intentó el Soliss FS Talavera, pero chocaba constantemente contra una defensa local que se mostró sólida. En el minuto once, el disparo fue de Manu Cebrián, pero el portero, Marco, detuvo sin problemas. Pasaban los minutos y el gol no llevaba. El Mengíbar se mostraba cómodo y no sufría en exceso ante el insistente ataque visitante.
A falta de siete minutos para el descanso, Juanma Marrube recurrió al juego adelantado de su cancerbero, Rafa Luque, para hacer de portero-jugador y, más adelante, lo intentó con el propio Dani Montes vestido de portero. Pero todos los intentos de ataque en superioridad fueron en balde. Mucha posesión y toque, pero poca peligrosidad.
Incluso, el Talavera se llevó algún que otro susto como el disparo desde campo propio a puerta vacía de Víctor Montes que a punto estuvo de suponer el segundo gol anfitrión cuando faltaban menos de cinco minutos para el descanso.
No le gustaba a Juanma Marrube la fluidez de su equipo en ataque en superioridad y solicitó un tiempo muerto para buscar más alternativas. En el minuto 19 avisaba Buitre pero su disparo acabó en córner.
No se desesperó el Soliss FS Talavera, que apostó por el juego de toque, la posesión y el tratar de mover a su oponente, sin embargo era incapaz de encontrar alguna grieta por la que filtrar un balón ofensivo. Cuando parecía que el 1-0 sería inevitable al descanso, apareció Carlitos. Se inventó una acción individual con un quiebro a su marcador y un disparo desde la frontal que entró por la escuadra. Era el 1-1 a 40 segundos para el intermedio.
Tras el descanso, sorprendió el entrenador visitante que desde el pitido inicial atacó en superioridad con Manu Cebrián vestido de portero para atacar en superioridad. Pero este planteamiento ambicioso no resultó suficiente. En el minuto 22, el Soliss FS Talavera sufrió un nuevo mazazo con el tanto de Víctor Montes.
Si Juanma Marrube había sido valiente con el empate, en desventaja no cambió de idea. Volvió a intentarlo con ataque de cinco pero cada uno de sus intentos fueron interceptados por la defensa local que, sin embargo, no dudaba en golpear cuando veía la oportunidad.
Tras casi diez minutos infructuosos de portero-jugador, Pablo Ordóñez asestó un golpe que resultó definitivo. Bingyoba recibió en posición de pívot, aguantó el cuero ante la marca contraria y asistió a Pablo Ordóñez que, a la carrera, sacó un fuerte remate que supuso el 3-1.
Quedaban nueve minutos que, 'a priori', supone tiempo suficiente para reengancharse al partido, pero los nervios fluyeron en el Soliss FS Talavera. Las precipitaciones fueron recurrentes y las ocasiones morían sin generar real peligro. A medida que corrió el cronómetro, Mengíbar se sintió más cómodo, incluso ante el ataque de cinco visitante, que no consiguió volver a hacer daño ni meter el segundo gol que le hubiese permitido reengancharse al partido.