Martín se siente «engañada» con el proyecto 'Paseo Verde'

J. Monroy
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Lo que Vistahermosa le presentó en julio fue un proyecto de 8-10 viviendas, no 98, a cambio de unas contraprestaciones que sí que aplaudió en la firma de «un borrador no vinculante»

Martín se siente «engañada» con el proyecto ‘Paseo Verde’ - Foto: David Pérez

Si para algo se presentó a presidenta de La Legua fue precisamente para estar en contra de proyectos como el 'Paseo Verde', por el que Vistahermosa pretende construir en el barrio otros 98 unifamiliares. Irene Martín se siente «engañada» por la promotora que ha incluido en su proyecto una presunta carta suya de apoyo. No ha sido así, explica, «ha sido literalmente un juego de trileros». Ella tan solo firmó por un borrador de 8-10 viviendas a cambio de otras contraprestaciones, pero en un documento para nada vinculante. Ni ella ni la anterior directiva, quiere dejar claro, están a favor de la construcción de 98 viviendas, todo lo contrario.

El proyecto de Vistahermosa, en periodo de información pública, parece haber levantado las iras vecinales. Al menos las asociaciones La Legua y Río Chico se han mostrado radicalmente en contra de este Perim, que pretende construir 98 viviendas en las actuales instalaciones deportivas del Club Monteverde, a cambio de la cesión de tres parcelas al Ayuntamiento, la creación de aparcamientos y la urbanización de parques. El caso es que el Ayuntamiento puso como condición para tramitarlo que tuviera el visto bueno de los socios del Club y de los vecinos del barrio. Y así parece que lo consiguió Vistahermosa, a tenor de una carta que recoge en su proyecto en la que la propia Martín expresa su apoyo.

Pero nada más lejos de la realidad. Martín ha querido aclarar «las medias verdades y mentiras que se están vertiendo» y que «la primera engañada he sido yo». Fue en julio cuando, con el antiguo secretario, se reunió con Vistahermosa para tratar el proyecto. «La constructora, propietaria del suelo del Club contaba con autorización para construir servicios terciarios privados en 1/3 del terreno, y quería solicitar permutarlo por la construcción de 8-10 viviendas unifamiliares, a cambio de esa permuta, cederían terrenos que mejorarían y aumentarían las zonas verdes y dotacionales del barrio», explica.

Ante esta exposición, «nos pareció que podía ser interesante, y al inicio del estudio de esta mejora es a la que el secretario y yo dijimos que sí». Fue entonces cuando «nos presentaron un documento que se firmó a modo de borrador, en ningún caso oficial ni vinculante». Ellos trasladaron a Vistahermosa que cuando estuviera el documento final, aprobado por los socios de Monteverde, debería ser la asamblea de su Asociación la que debería ratificarlo en todo caso.

«Pero han decidido jugar sucio, utilizando un borrador cuya firma es una foto impresa, sin fecha ni validez alguna, para justificar cuatro meses después una supuesta aprobación a un proyecto que a día de hoy desconocemos todos», reclama Martín. Alguien sin su permiso registró en noviembre su visto bueno a un proyecto que no era real. Es un documento, continúa, cuyo uso no han autorizado ni ella, ni la Asociación, más que para estudiar alternativas para conseguir terrenos públicos para el barrio. Porque no es lo mismo, recuerda, que el documento llegue con el visto bueno de los socios de Monteverde que sin él y, lo más importante, no es lo mismo «8-10 viviendas que 98».

Martín recuerda que este proyecto solo lo puede aprobar el Ayuntamiento, y no una Asociación de Vecinos que «no es de utilidad pública y, por lo tanto, no tiene ni voz ni voto frente al Ayuntamiento». En estas condiciones, concluye con ironía «yo sola tengo la potestad de aprobar proyectos urbanísticos con una sola firma, en un borrador sin fecha». La buena noticia es que parece que el Ayuntamiento se ha comprometido ante la Asociación explícitamente a no aprobar nada sin la aprobación vecinal.

Un parque que ya tiene fondos Next Generation. Martín recuerda además un punto concreto de este Perim por el que ya preguntó el PP en la comisión de Urbanismo del lunes. Porque el sendero-merendero-bulevard hacia el puente que une el barrio con Valparaíso, que es una de las supuestas contraprestaciones que Vistahermosa desarrollará si le permiten su nueva promoción, «fue algo a lo que la alcaldesa en persona y el concejal de urbanismo, José Pablo Sabrido, se comprometieron a ejecutar con los fondos Netx Generation».

En ningún momento, recuerda Martín, el Ayuntamiento expuso a los vecinos «que esa operación la ejecutaría Vistahermosa ni que nuestra opinión fuera vinculante». «Esto es una trama que han urdido el Ayuntamiento y Vistahermosa y, desde luego, no ha tenido nunca el apoyo de la anterior Junta» porque hasta la publicación del Perim por La Tribuna, los vecinos desconocían la totalidad del proyecto.