La sección sindical interempresas de CCOO en Airbus y los sindicatos UGT FICA y ATP-SAe han convocado un primer ciclo de tres jornadas de huelga en los ocho centros de trabajo que la multinacional tiene en Andalucía, Madrid y Castilla-La Mancha, en Illescas y Albacete, en estas dos que comienzan hoy y prosiguen jueves y viernes.

Unos paros que «acabarán en el momento en el que la dirección esté dispuesta a garantizar que los trabajadores no pierden poder adquisitivo», informó.

CCOO explicó que la huelga se inició este lunes en centros con calendarios de cuartos turnos y trabajo en festivos y fines de semana, que afecta a un pequeño porcentaje de las plantillas, y que será el miércoles cuando se produzca en las ocho factorías, incluidas las plantas de Illescas, que afecta a unos 700 trabajadores, y de Helicopters Albacete, que cuenta con cerca de 500 empleados, que proseguirá jueves y viernes.

Airbus España, que firmó su convenio colectivo el pasado mes de diciembre, acordó con sus 12.000 trabajadores revisar las condiciones económicas en el último trimestre de este año, «pero no parece tener intención ninguna de hacerlo», afirmó el presidente del comité de empresa de la planta illescana, Óscar Aguado.

Y, ello, «pese a que es aún más necesario de lo que cabía prever hace un año porque desde entonces se ha disparado el IPC y estamos perdiendo poder adquisitivo a chorros», añadió Aguado, quien ha dicho estar «a la espera de que la dirección de la empresa mueva ficha».

«Vamos a la huelga ante la dilatación de cualquier negociación y la falta de propuestas claras por parte de la dirección y los paros acabarán en el momento en el que la dirección esté dispuesta a garantizar que los trabajadores no pierden poder adquisitivo», sostuvo.

Aguado concretó que Airbus tiene «récord de pedidos, entregas y facturación, da beneficios y con resultados récord, incluso más importantes que antes de la pandemia, y la dirección tiene que reconocer el esfuerzo de sus trabajadores en los últimos años», zanjó.

La presidenta del comité de empresa de Airbus Helicopters Albacete, África Tarancón, reforzó que «no puede ser que la inflación y las incertidumbres únicamente se reflejen negativamente en los salarios de los trabajadores».

«El dilema es claro: salario o conflicto. Las plantillas lo tenemos claro y hay que ver si también lo tiene claro la empresa», sentenció.