En siete días comienza la cuenta atrás para que los ciudadanos acudan a las urnas el 28 de mayo y elijan a sus gobernantes autonómicos y locales para los próximos cuatro años. El Gobierno regional publicará el 4 de abril en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM) el decreto de convocatoria de estos comicios, dando así el pistoletazo de salida a 53 días intensos de actos, ruedas de prensa y mítines de los partidos políticos  que buscarán arañar hasta el último voto posible.

El calendario quedaría así: del 4 de abril al 11 de mayo será la precampaña electoral; y del día 12 hasta las 00.00 horas del día 27, la campaña, donde las formaciones políticas podrán pedir, a pecho descubierto, el voto a la ciudadanía. 

No obstante, la dinámica de trabajo del Gobierno regional va a cambiar bastante a partir del martes, 4 de abril. Según explicó a La Tribuna el viceconsejero de Administración Local yCoordinación Administrativa, José Miguel Camacho, y recoge el artículo 50.2 de la Ley Orgánica del régimen general electoral (Loreg), desde la convocatoria de las elecciones y hasta la celebración de las mismas queda prohibido cualquier acto organizado o financiado, directa o indirectamente, por los poderes públicos que contenga alusiones a las realizaciones o a los logros obtenidos, o que utilice imágenes o expresiones coincidentes o similares a las utilizadas en sus propias campañas por alguna de las entidades políticas concurrentes a las elecciones.

El siguiente artículo de la Loreg señala que, asimismo, durante el mismo periodo queda prohibido realizar cualquier acto de inauguración de obras o servicios públicos o proyectos de éstos, cualquiera que sea la denominación utilizada, sin perjuicio de que dichas obras o servicios puedan entrar en funcionamiento en dicho periodo. 

Camacho puso un ejemplo: el Ejecutivo autonómico puede poner en servicio un consultorio médico que ha terminado de construir, pero no puede hacer una inauguración que dé publicidad a dicha obra.

Es por ello, que en las semanas previas a la publicación del decreto de convocatoria de las elecciones autonómicas y municipales, en este caso, los actos inaugurales de carreteras, colegios o centros sanitarios se multiplican. Nadie se quiere quedar sin la foto de una infraestructura esperada por los vecinos.

Pero el 'gran hermano' siempre está vigilante. La oposición, como viene siendo tradición elección tras elección, no perderá ojo de las decisiones que tome el Gobierno regional de aquí a la cita con las urnas; y acudirá a la Junta Electoral de Castilla-La Mancha para denunciar cualquier acto que no se ajuste a la Loreg. 

«Esas peleas siempre han existido y existirán», reveló Camacho, quien aventuró que en ese periodo en el que no están permitidas ni inauguraciones ni balances de la gestión realizada hasta la fecha «va a haber denuncias, seguro, por experiencia de elecciones anteriores». 

cuidado con las redes sociales. El viceconsejero de Administración Local y Coordinación Administrativo puso también el foco en el uso de las redes sociales de aquí al 28 de mayo. Aseguró que muchos piensan que en ellas cabe y se puede hacer de todo, pero también están afectadas por las limitaciones de la ley electoral. 

Lo que queda claro es que la Junta Electoral de Castilla-La Mancha tiene por delante casi dos meses de duro trabajo, registrando y estudiando las denuncias que lleguen a su mesa. Denuncias que, en su mayor parte, no llegan a nada pero que consiguen parte del efecto deseado por los firmantes: dejar en evidencia la mala gestión del oponente y recordar que la opción más útil para lograr el cambio es acudir a las urnas.

Las Cortes harán un 'parón' legislativo durante abril y mayo

A partir de las elecciones entrará en funcionamiento la Diputación Permanente, de la que forma parte el 45% de los parlamentarios esta legislatura

Las Cortes regionales están de cuenta atrás. Seguramente esta semana convoquen su último pleno para aprobar la Ley de Agricultura Familiar y el reglamento de la Cámara de Cuentas. A partir de la publicación de la convocatoria de elecciones, el día 4 de abril, entrarán en una especie de 'parón legislativo'. No es que se disuelvan, pero existe la costumbre de cesar la actividad legislativa para no enturbiar de más la precampaña y campaña electoral. Eso sí, los diputados siguen en activo y pueden seguir realizando su trabajo de representación en las provincias en las que han sido elegidos. 

Este período de letargo termina el mismo día de las elecciones, cuando se disuelven las Cortes. ¿Qué ocurre hasta que se vuelvan a constituir con los nuevos diputados? Ahí es cuando entra en funcionamiento la Diputación Permanente. La de esta legislatura está formada por 15 diputados, ya elegidos, que son un 45 por ciento de todos los parlamentarios que hay en las Cortes. 

Ellos tendrían la responsabilidad, por ejemplo, de autorizar presupuestos, ampliaciones o créditos extraordinarios si se diese una situación de urgencia o de extrema necesidad. La proporción entre partidos sigue la que hay en la Cámara.