Álvaro García: «Doy gracias a Lorenzo porque hoy estoy aquí»

J. Monroy
-

El amigo del joven asesinado, testigo del crimen de la noche de Halloween confía en la labor policial. «Aunque el caso es complicado, mi esperanza sinceramente es que cojan al asesino», asegura

Álvaro estuvo presente en la manifestación del domingo. - Foto: Ángeles Visdómine/EFE

«Yo, a parte de dar gracias a Lorenzo por que hoy estoy aquí, poco más puedo hacer». Álvaro, amigo de Lorenzo Pompiliu, presente en el momento de su asesinato, no pudo faltar a la cita, la manifestación de este domingo en el Polígono para pedir justicia para su amigo en el primer aniversario de su muerte. Allí atendió sereno a los medios para ofrecer su ayuda en lo que sea posible tanto a la familia de Lorenzo, como a la Policía. Pidió que el crimen no quede en el olvido y mostró su esperanza en que, a pesar de lo difícil del caso, la Policía dé con el asesino. Aunque prefiere no pensar en ello.

El domingo fue para Álvaro otro día difícil, «pero tampoco es que este año atrás haya sido muy fácil». Desde el momento en el que se produjo el crimen, explica, «cambian muchas cosas en tu vida. Hay unos meses muy duros en los que tienes que aceptar muchas cosas y aún a día de hoy aún no termina de estar todo aceptado».

Álvaro mostró también lo complicado que es gestionar una situación como la que vivió. «Se hace lo mejor que se puede, y al final solo podemos tirar para adelante, porque no hay otra. No se pueden cambiar ya las cosas así que no hay otra que tratar de avanzar como se pueda, no hay otro modo».

Con la tristeza desbordándole los ojos,Álvaro, que sostiene un cartel con una poesía dedicada a su amigo,  siente que tiene una deuda con la familia del joven asesinado. Por eso, y  hasta el momento en el que ellos me requieran, yo esteré allí para cualquier cosa que necesiten». Por eso estuvo también en la manifestación del domingo y en la organizada por la familia cuando Lorenzo hubiera cumplido 22 años. «Nosotros venimos aquí como amigos y porque, evidentemente, queríamos a Lorenzo y queremos apoyar a su familia.; queremos que este tema no se olvide, darle visibilidad, y dentro de lo poco que nosotros podemos hacer, esto es lo mínimo».

Confianza en la Policía. Álvaro se mostró convencido de que, un año después, la Policía va a hacer lo que pueda, aunque no se atrevió a aventurar si todo dará resultado y se dará con el asesino. «Mi esperanza es que sí, sinceramente». Aunque después de un año dándole vueltas, opina que «por las características del caso, es muy complicado».  Asimismo prefiere no aventurarse a opinar siquiera si el asesino de su amigo vive o no en el barrio como cree el padre de Lorenzo, «porque eso genera un clima de inseguridad y desconfianza, que creo que tampoco beneficie al barrio».

Además y después de 22 años viviendo en el Polígono, Álvaro afirma que no quiere dejar el barrio. «Una cosa así te cambia la vida y te cambia muchas cosas, pero al final, vivo aquí y este es mi barrio de siempre, no quiero dejar de vivir aquí», afirma. Cierto es que, al principio, sobre todo, tenía aprehensión a salir de noche o estar solo en la calle, «pero al final esas cosas se superan, en mi caso por lo menos, enfrentándose a ellas, saliendo más a la calle y estando algo más tú solo. Es eso o no vivir más tu vida y creo que esa tampoco es la solución».