El Ayuntamiento de Lagartera ha decidido atajar el problema sanitario extendido por diferentes zonas d e la localidad por la abundancia de colonias de gatos callejeros incontroladas y ha publicado una ordenanza de tenencia, control y protección de los animales. En este sentido, ha informado a los vecinos del deterioro de las condiciones de salubridad del entorno donde reciben alimentos estos ejemplares, además de olores hediondos, suciedad, dispersión de basuras o deyecciones de los animales.

En este sentido, pone como ejemplo de riesgo para la salud las zonas terrizas de la escuela de educación 'El Castillejo' y el colegio público 'Jacinto Guerrero', donde juegan los niños. Las quejas vecinales se refieren a ruidos, maullidos en época de celo o peleas entre los animales. Asimismo, mencionan deyecciones de perros y otros animales en la vía pública.

El Ayuntamientos señala en el comunicado difundido en sus canales de comunicación que ha de asegurar la higiene, la salud pública y la seguridad de personas y bienes. Uno de los artículos de la ordenanza, publicada en el Boletín Oficial de la Provincia el pasado día 19, indica que, por razones de salud pública y protección al medio ambiente urbano, se prohíbe el suministro de alimentos a animales vagabundos o abandonados, así como a cualquier otro cuando de ello puedan derivarse molestias, daños o focos de insalubridad. Los propietarios de inmuebles y solares adoptarán las medidas oportunas al efecto de impedir la proliferación en ellos de especies animales asilvestradas.

Las infracciones se consideran leves y serán sancionadas con multa de entre 90 hasta 300 euros.