Sigue la marcha triunfal del CD Illescas cuando juega ante sus seguidores después de derrotar el sábado al CP Villarrobledo por 2-0. Son ya más de 500 los días en los que la escuadra sagreña no sale derrotada cuando juega al amparo de su público. Bien es cierto que en esta ocasión se le puso el tema más a su favor cuando en el minuto 26 fue expulsado con tarjeta roja directa el extremo visitante Miguel Serrano en una acción determinante.
El partido empezó con dominio del cuadro illescano y, de esta manera, en el minuto 5 fue Molina el que disparó en buena posición para anotar, pero el balón se marchó alto. La réplica llegó tras un centro de Serrano que remató de cabeza Marcos Moreno ligeramente alto. En el minuto 12 hubo un choque entre Mingo y Alfonso de la Cruz del que salió peor parado el veterano defensa central del equipo villarrobledense, con un fuerte golpe en la cara que le obligó a ser sustituido por Raúl Calero. Posteriormente, Alfonso de la Cruz fue trasladado a un hospital de Toledo donde se le operó de la fractura de su tabique nasal. El árbitro le enseñó una tarjeta amarilla a Mingo por juego peligroso en esa acción.
En el minuto 26 fue expulsado con tarjeta roja directa el visitante Serrano por una fuerte entrada sobre Mingo, cuando el ariete iniciaba una contra peligrosa. El cuadro visitante protestó esa tarjeta roja por estimar que con una amarilla era suficiente.
El CD Illescas prolonga su marcha triunfal (2-0)La recta final de la primera mitad fue de acoso illescano. En los minutos 34 y 36 tuvieron opciones de marcar Mingo y Ranera. En la primera de ellas, salvó Pablo Rodríguez en una gran intervención. En la segunda. el remate del capitán del conjunto blanquillo se marchó desviado por poco. Por su parte, Josemi llevó el susto a la parroquia local en el minuto 40, pero no llegó al 0-1.
En la segunda mitad, el acoso inicial del Illescas fue constante en busca del 1-0. Christian, Mingo y Porcel estuvieron a punto de marcar en los minutos 52, 57 y 60, respectivamente, pero sus acciones no encontraron la portería defendida por Pablo Rodríguez. Así se llegó al minuto 66, cuando un centro lateral de Víctor lo introdujo en su propia portería Raúl Calero, un autogol que significaba el 1-0. Se desanimó el Villarrobledo y lo aprovechó el Illescas para sentenciar la contienda con su segundo gol de la tarde en el minuto 78. Fue como consecuencia de un magistral lanzamiento de falta desde el borde del área a cargo del canario Cabezola. De aquí al final del encuentro, el Illescas dominó a placer ante un rival rendido y que todo lo tuvo en contra: una lesión grave, una expulsión y un autogol.