Buena noticia para la ciudad de Toledo en un año marcado por la pandemia. El AVE que unirá Madrid con Portugal pasando por Extremadura tendrá parada en Toledo. Así aparece recogido en el estudio informativo que acaba de aprobar el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y que saldrá a información pública en próximas fechas. La solución propuesta, que incluye paradas en Toledo, Talavera y Oropesa tiene una longitud de unos 127 kilómetros y el presupuesto estimado varía entre los 1.302 y los 1.307 millones de euros. Asimismo. la línea se ha diseñado para tráfico exclusivo de viajeros entre Madrid y Talavera de La Reina y tráfico mixto de viajeros y mercancías entre Talavera y Oropesa.

La alternativa seleccionada tiene su origen en la línea de alta velocidad Madrid-Toledo a la entrada de la actual estación de Toledo situada en el barrio de Santa Bárbara. En la capital regional, se han seleccionado dos opciones que son funcionalmente muy similares, pero tienen un impacto visual diferente, una discurre en túnel y la otra en superficie. La solución definitiva dependerá del análisis de las alegaciones recibidas tras el proceso de información pública. En cualquier caso, la estación actual dejará de ser un fondo de saco.

Una de las opciones mencionada supondrá el soterramiento de la línea desde Safont hasta el término municipal de Bargas. Para lograrlo, el trazado continuaría en paralelo a Huerta del Rey pero realizando una suave curva hasta llegar a escasos metros del río, justo enfrente de la Noria de Safont. Allí comenzaría un túnel que salvaría el río y lo que iba a ser el recinto ferial y llegaría hasta Bargas, a unos cientos de metros de donde se encuentra el parque comercial de La Abadía. A partir de ahí la línea dejaría de estar soterrada.

A continuación, el trazado se dirige hacía el corredor ferroviario actual, pasa por la localidad de Talavera de la Reina en variante respecto al actual corredor y por la estación de Oropesa para finalizar en el límite de la provincia de Toledo.

El tramo Madrid -Toledo-Talavera Oropesa se diseña para doble vía electrificada con ancho estándar, dando continuidad al diseño de las secciones actualmente en construcción y/o en proyecto de la línea Oropesa-frontera portuguesa de la Línea de Alta Velocidad Madrid-Extremadura-frontera portuguesa.

El origen de la nueva línea de alta velocidad Madrid-Extremadura se corresponde con su inclusión en el denominado Plan Estratégico de Infraestructuras y Transporte 2005-2020 (PEIT), dentro de la Red de Altas Prestaciones Ferroviarias, así como en el posterior Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda 2012-2024 (PITVI). Asimismo, ya formaba parte del Proyecto Prioritario número 3 de la Red Transeuropea del Transporte (RTE-T) y actualmente se incluye en el Corredor Atlántico de la red básica transeuropea.

 «Esta actuación permitirá mejorar la calidad y prestaciones de los servicios ferroviarios y dar continuidad al resto de tramos del corredor ferroviario Madrid-Extremadura, actualmente en marcha en diferentes grados de avance», señala la nota del Ministerio de Transportes.

La redacción del estudio informativo del tramo Madrid-Oropesa del corredor extremeño de alta velocidad salía a licitación el 25 de agosto de 2017 con la obligación de contemplar expresamente que la línea pasara por Toledo, dando continuidad al trazado que parte de La Sagra.

El Ministerio de Fomento precisaba que la integración de Toledo en este eje ferroviario aumentaría la demanda potencial y supondrá la creación de una oferta de servicios ferroviarios más atractiva para el conjunto del corredor, con mejores frecuencias. De esta forma, el Ministerio dejaba claro el interés en Toledo, que no se circunscribiría a los argumentos de ahorro. Los cálculos  de Fomento -ahora de Transportes- cifraban en 110 millones de euros el ahorro que supondrá el aprovechamiento del actual trazado hasta Toledo. Para enlazar a Talavera se barajan dos opciones que ha tenido que despejar el estudio informativo: Rielves o Carmena. Probablemente para la capital lo de menos sea la opción escogida y lo de más las expectativas de llegada de viajeros que se añadirían al millón y medio que utilizaban anualmente el AVE (Avant en la terminología de Renfe) Madrid- Toledo.