Alejandro Bermúdez

Con los pies en el suelo

Alejandro Bermúdez


Cortos de vista

10/03/2023

Igual que en la conducción, en la vida política, social y económica es un peligro usar las luces cortas. Sin embargo, tengo la sensación de que este defecto está muy extendido en la forma de hacer y pensar de muchas personas, instituciones y sobre todo partidos políticos y gobiernos.
Suele ocurrir que la 'solución a corto' suele ser más cómoda y por tanto más atractiva que cuando se mira a largo plazo y es muy fácil caer en la tentación. Esta es la razón principal por la que las doctrinas de izquierdas se venden tan bien y acaban dando luego tantos disgustos.
Tengo la sensación de que esta mirada corta, le está tentando al gobierno con Ferrovial. Este gobierno, al que tanto le gusta presentar a los grandes empresarios como fumadores de puros, sacamantecas ocultos en cenáculos de caverna, cuando uno de estos 'peligrosos' capitalistas dice que se va, sufre un ataque de cuernos que no puede aguantar; entonces ve el peligro que supone que cunda el ejemplo, que otros le sigan, que no es fácil, o que otros no vengan, que esto sí es más posible.
La pobreza de miras del gobierno, además de llevarlo casi hasta el insulto personal, le está tentando para adoptar alguna medida que haga imposible ese cambio de sede que ha anunciado Ferrovial. Pero poner chinas en la libertad de este empresario, retorcerlo el brazo hasta hacerlo desistir de su intención, podría parecer una solución de éxito y hasta seguro que lo vendería como tal. Sin embargo, el daño que esta medida podría hacer a nuestra economía sería verdaderamente incalculable. ¿Qué imagen va a dar España a nivel internacional si hace un cierre de fronteras a lo Corea del Norte? ¿Cuántos inversores que tienen puestos sus capitales en empresas españolas nos abandonarían? ¿Cuántas empresas que pueden tener intención de asentarse en España desistirían de ello?
Los resultados del cortoplacismo ya se vieron nítidamente con la manifestación del 8-M-20. Obviamente el virus se tenía que extender, pero quienes se contagiaron en esta manifestación, cuando el gobierno ya conocía el peligro y fallecieron como consecuencia de ello o contagiaron a otros que acabaron muriendo, son crímenes de esta miopía interesada. De hecho, hay un pueblo, al menos, en nuestra provincia en el que una fiesta conmemorativa de esta fecha causó un buen número de desgracias.
Los manoseos a que están sometiendo al mercado de la vivienda, que, seguro que son aplaudidos por una buena parte de gente bienintencionada, está produciendo justo lo contrario que pretenden, porque están provocando escasez de oferta y cuando esto ocurre no hay forma de abaratar el mercado.
Las jaleadas subidas de impuestos a las grandes empresas son otra falacia de cegatos. Primero porque los impuestos se acaban repercutiendo en los productos que ofrecen estas empresas y después porque a mayores impuestos, menor demanda y por tanto se acaba por recaudar menos.
La subida de los salarios por encima de lo que lo hace la productividad, que seguramente será también aplaudida como 'una conquista social', solo provoca inflación y paro.
El problema de todo esto es que los resultados no se ven de forma inmediata. El manirroto, siempre tiene una época de lujo y pavoneo antes de abrazar la ruina. Lo peor es que al final la realidad se impone y ocasiona un sufrimiento perfectamente evitable.