La RFEF ha remitido un escrito a los 40 clubes de Primera Federación para someter a votación una nueva propuesta con el objetivo de salvar la categoría. Los presidente tienen 48 horas para votar la nueva oferta; para la decisión se exige mayoría y no unanimidad. A lo largo de esta última carta hay referencias a los 18 clubes, entre ellos el Talavera, que trasladaron a la RFEF su desacuerdo con el modelo económico que pretendía implantar el organismo federativo que preside Luis Rubiales.

La RFEF pone de manifiesto que las líneas básicas que se someten a valoración de los clubes tienen como objetivo el mantenimiento y consolidación definitiva de la Primera Federación. Por otro lado asegura que ha aceptado una parte muy importante de las aportaciones que han realizado los clubes y la representación sindical. Y en caso de no aprobarse la Federación tomará medidas en cuanto a la viabilidad de las categorías no profesionales.

Sobre la propuesta de control económico refleja que será necesaria licencia federada antes del inicio de temporada. Para su obtención será requisito imprescindible presentar los datos económicos de las dos últimas temporadas anteriores auditadas. También deben introducirse mecanismos de control que permitan asegurar el pago de los salarios de los jugadores y de los entrenadores.

Por otro lado, considera muy conveniente la introducción del llamado impuesto de lujo, como mecanismo de compensación a los clubes no deficitarios. En este sentido, el déficit es admisible siempre que sea cubierto por el club matriz o por los inversores.

En otro orden, la RFEF acepta, como manifestaron los 18 clubes en su carta, que el sistema de revisión de las sanciones disciplinarias debe cumplir con lo regulado en el desarrollo de la actual Ley del Deporte; si este permite diversas posibilidades, los órganos competentes de la RFEF adoptarán una de ellas que será común para todas las competiciones y todos los niveles.

Por otro lado, la Federación impulsará la aprobación de un convenio colectivo para las competiciones no profesionales. Y la RFEF deberá aprobar previamente los acuerdos entre clubes de la misma categoría, especialmente, los de contenido comercial.