El presidente de las Cortes, Pablo Bellido, defendió esta mañana en Salamanca la pionera Ley de medidas contra la despoblación aprobada por unanimidad esta legislatura en Castilla-La Mancha y anima a «superar el provincianismo» para revertir este fenómeno, con una mirada más amplia y sin producir «quiebras en la convivencia» propias de planteamientos nacionalistas.
El presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Pablo Bellido, participó en el Casino de Salamanca en las III Jornadas sobre Historia del Parlamentarismo: información y propaganda en tiempos de Maldonado, organizada por las Cortes de Castilla y León con motivo del V Centenario del Levantamiento de las Comunidades de Castilla.
A preguntas de los medios de comunicación, minutos antes de participar en este foro, el presidente de la asamblea castellano-manchega recordó que el fenómeno de la despoblación rural tiene una escala internacional, «no ocurre solamente en España y en Europa y genera movimientos internacionales muy potentes», pero defiende que en territorios como Castilla-La Mancha las políticas para revertir esta situación llevan décadas en marcha, «aunque haya sido ahora cuando se ha puesto nombre al fenómeno», en referencia a denominaciones que personalmente no le convencen como «España vacía» o «España vaciada».
Bellido recalcó que es «la primera ley para luchar contra la despoblación de Europa» a través de una estrategia de «medidas fiscales, económicas y que blindan servicios públicos en el entorno rural».