Fue cruel la derrota cosechada por el Torrijos contra el enrachado Villarrubia, decidida por la pegada del bloque villarrubiero y la mala puntería (y suerte) local. Hasta tres veces se encontró con la madera el cuadro toledano, que mereció más en una primera parte que terminó, pese a todo lo visto, en clara desventaja (0-2). Solo Bamba pudo descontar en el epílogo para el equipo que adiestra Esteban Becker, que acumula cuatro reveses seguidos.
Empezó mejor el Villarrubia. En los primeros compases ya avisó de sus intenciones al desperdiciar una ocasión en el área local nacida de un saque de esquina y tras una salida en falsa del portero local Berlana. La réplica del Torrijos llegó diez minutos después cuando un buen centro de Max fue rematado por Bamba. El disparo fue a parar al poste evitando así la apertura del marcador. Un rato después, Max volvió a filtrar un balón para Bamba, cuyo remate devolvió otra vez el palo. La mala suerte se siguió cebando con el conjunto toledano, ya que en el minuto 32, Marañón puso el 0-1. Y como si la película volviese a repetirse, dos minutos más tarde fue Óscar Cabo el que mandaba el tercer balón a la madera tras un muy buen disparo desde fuera del área.
Por si tanta mala fortuna fuera poca, en la jugada siguiente el equipo visitante amplió su renta. David Barca ingresó por en el segundo palo y mandó el balón a la red. Poco antes del descanso, Marañón perdonó el 0-3 tras una pérdida de Max en el centro del campo.
En el segundo tiempo, el Villarrubia volvió a entrar más enchufado. Socorro disparó cruzado un balón que se fue rozando el palo. El Torrijos se marchó en busca de un tanto que le metiera en el partido, y tras un jugadón de Bamba, el central Ambo, que se puso de delantero tras el segundo mazazo, perdonó la anotación para el Torrijos. Siguió atacando el conjunto local pero no generó suficiente peligro. Hasta en tres oportunidades pudo conseguir el descuento, pero le faltó acierto en los últimos metros.
Por el contrario, el Villarrubia defendió muy bien durante los noventa minutos, y además cada vez que llegaba a portería contraria lo hacía con bastante peligro. A diez minutos para el final, el conjunto dirigido por Miguel Aroca volvió a perdonar el 0-3, primero con una ocasión de Casi y luego con un paradón de Berlana tras un disparo de César. Casi sobre el final del tiempo reglamentario, el Torrijos se quedó con diez jugadores. A pesar de ello, en esa misma jugada, el conjunto torrijeño recortó distancias gracias a Bamba que estableció el 1-2. Entonces, los locales empezaron a soñar con el empate en el tiempo añadido. En el añadido, Pacheco remató una semivolea que se marchó fuera y Bonilla desperdició una buena opción en una falta muy bien posicionada que despejó la defensa visitante.
Al final, victoria para un Villarrubia que sigue pletórico y, con esta victoria, ya son nueve partidos consecutivos los que lleva sin perder. En el otro lado de la balanza se encuentra un Torrijos que lleva cuatro derrotas consecutivas y que buscará cortar esta racha el próximo domingo en el San Francisco ante el colista Talavera B.