La pandemia disparó en 2020 la tasa de absentismo laboral española llegando al 8,9%. Un máximo histórico que se debió, al aumento de las horas perdidas por incapacidad temporal y también a la caída de las horas pactadas efectivas por el incremento de los expedientes de regulación temporal de empleo (Erte) en el momento más duro del confinamiento.
Veníamos de un 2019 que dejaba una tasa de absentismo del 5,5%. Si bien todavía no se recuperan los valores previos a la pandemia, el último trimestre de este año arroja una tasa del 6,2% a nivel nacional según el informe publicado por la empresa de recursos humanos Randstad que ha tenido en cuenta cifras procedentes de la Encuesta Trimestral de Costes Laborales del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Este informe refleja que durante el segundo trimestre de 2022, 59.431 profesionales de Castilla-La Mancha faltaron de media a su trabajo a diario, de los cuales 46.336 lo hicieron con baja médica y 13.095, sin causa justificada. Es decir, que la tasa de absentismo se sitúa en la comunidad en el 5,9%, tres décimas por debajo de la media nacional (6,2%). El volumen de profesionales que faltaron a sus trabajos en la región supone el 4,7% del total del país.
Apunta el informe que en el conjunto del país destaca que más de 1.260.000 de españoles no acuden a su puesto de trabajo de media cada día. En concreto, durante el segundo trimestre de 2022, fueron 1.261.633 profesionales, de los cuales el 22,1% (279.169) lo hicieron pese a no estar de baja, mientras que el 77,9% (977.054) se ausentaron por una incapacidad temporal.
Este absentismo laboral supone que en nuestro país se pierden el 6,2% del total de las horas pactadas, reduciéndose un 0,9% con respecto al trimestre anterior. El absentismo no debido a incapacidades temporales, es decir, el no justificado, tuvo una tasa del 1,4%.
Analizando los datos por comunidades autónomas, por debajo de la media nacional, ubicada en el 6,2%, se encuentran Andalucía (6%), Castilla-La Mancha, Extremadura y La Rioja (las tres con el 5,9%). Aunque las regiones con menor tasa de absentismo, un trimestre más, fueron Baleares (5,5%) y la Comunidad de Madrid (5,%).
Por encima de la media nacional se encuentran Euskadi (8,4%), Canarias y Cantabria (ambas con el 7,3%), siendo las regiones donde mayores tasas de absentismo se registraron durante el segundo trimestre de 2022. Las siguen Asturias (6,9%), Galicia (6,8%), Navarra (6,6%), la Región de Murcia (6,5%), Cataluña (6,3%), Aragón y Castilla y León (ambas con el 6,2%).
sector servicios. En cuanto a sectores, el informe revela que el de servicios es donde se registra un mayor absentismo, con una tasa general del 6,3%, seguida muy de cerca por la industria, con un porcentaje del 6,2%. El sector de la construcción es donde menos absentismo se produce, un 4,7%, 1,5 puntos porcentuales por debajo de la media de la economía.
Los sectores concretos de actividad que han registrado menores tasas de absentismo durante el segundo trimestre de 2022 han sido Actividades inmobiliarias, Publicidad y estudios de mercado, Industria del cuero y del calzado (las tres con el 4,1%), Venta y reparación de vehículos de motor y motocicletas, y Actividades cinematográficas, de vídeo y de programas de televisión, grabación de sonido y edición musical (ambas con el 4%).
Apunta además que los mayores porcentajes de absentismo tuvieron lugar en Actividades sanitarias (10,2%), Asistencia en establecimientos residenciales, Actividades de servicios sociales sin alojamiento (10,1%), Actividades de juegos de azar y apuestas (9,8%), y Actividades postales y de correos (9,6%).