La Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), organismo responsable de la administración hidráulica de la cuenca, se ha pronunciado en palabras a este diario sobre los rescates frecuentes en el río Alberche a su paso por la provincia. La suelta de agua ha desencadenado desde hace años riesgos para los bañistas, principalmente en la zona de la urbanización 'Calalberche' y del término de Escalona. El último episodio ocurrió el pasado domingo; los bomberos del Consorcio rescataron a cuatro miembros de una familia, dos de ellos menores, en el cauce por esa última localidad.

De tal manera, la CHT anticipa que el baño supone un uso común del dominio público hidráulico, al margen de los tramos donde se encuentre específicamente prohibido, que no necesita de autorización administrativa y que se realiza «bajo la responsabilidad del usuario». Así, aclara que el bañista debe conocer que la dinámica fluvial presenta «riesgos inherentes a ésta y que su inobservancia puede llegar a producir situaciones de riesgo».

Los vecinos de la provincia de Toledo deben escapar, por ejemplo, a la vecina provincia de Ávila para darse un baño en los ríos. Solo el Alberche y las Lagunas de Villafranca de los Caballeros permiten disfrutar del agua durante el sol abrasador del verano.

La CHT explica sobre el río Alberche que el tramo comprendido aguas abajo del embalse de Picadas hasta el embalse de Cazalegas, registra incrementos de caudal como consecuencia de los desembalses. «Se realizan según las condiciones de las concesiones vigentes y de acuerdo con la explotación ordinaria del embalse», sostiene el organismo regulador de la cuenca.

Este tramo de más de 60 kilómetros (ahí se encuentran 'Calalberche' y Escalona) «hace difícil establecer medidas de aviso». Según la CHT, la mayor parte de los bañistas utilizan tramos «donde se viene realizando tradicionalmente la actividad de baño, en los que la amplitud del cauce minimiza el efecto de las posibles crecidas».

Cada verano, los medios de comunicación informan de rescates de bañistas en el río Alberche. Siempre por la misma causa. El aumento precipitado de caudal por una suelta de agua inesperada que pilla por sorpresa a los veraneantes en mitad del cauce. El último ocurrió el domingo con cuatro miembros de una familia salvados, dos de ellos niños de 13 años.

Los bomberos del Consorcio pusieron a salvo a principios de junio de 2021 a dos chicas de 15 y 16 años que estaban encaramadas a un árbol tras una crecida del caudal del río. El rescate finalizó de noche, y con las víctimas con hipotermia.

En 2017, los servicios de emergencias rescataron a cuatro bañistas a la altura de la urbanización 'Calalberche'. En el mismo lugar, pero más aparatoso fue el rescate en 2015 de 17 bañistas, seis menores En 2013, cinco bañistas, cuatro adultos y un menor, fueron también rescatados.

Por su parte, el diputado delegado del Consorcio provincial de Bomberos, Rafael Martín, se mostró ayer preocupado por la repetición de un nuevo rescate en el Alberche. «El problema es que abren las compuertas sin avisar», señala por el aumento repentino del caudal, como ocurrió el pasado domingo.

«Estamos intentando que se programen para no tener que lamentar ninguna desgracia», apuntó Martín por la fuerza que coge el caudal por estos desembalses. Los bañistas quedan a merced en las isletas del interior del cauce.

En este sentido, confirmó que la Diputación se ha puesto en contacto con la CHT para corregir esos desembalses inesperados.