El presidente de LaLiga, Javier Tebas, advirtió ayer que ya no puede haber ningún tipo de sanción «deportiva» para el Barcelona por el 'caso Negreira', al haber ya prescrito para ese tipo de castigos, y que se personarán «como acusación particular» si finalmente hay una querella por parte de la Fiscalía, al tiempo que dejó claro que «estas cosas no pueden ocurrir en el fútbol español».
Tebas ofreció «la postura» de la patronal tras haber visto «todo» ya sobre este asunto que implica al que fuera vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, José María Enríquez Negreira y al conjunto catalán.
«Lo primero es que es evidente que en 2018 y los anteriores las normas de 'compliance' que controlan los conflictos de intereses tanto del CTA como del Barcelona no funcionaron, ya que, con lo que hemos visto, esos servicios no se deberían haber prestado ni en los importes ni en los hechos que se han prestado», afirmó.
En este sentido, el dirigente puntualizó que, aunque «se habla de que pudiera haber sanciones deportivas», desde el organismo ya han «estudiado, y no es posible, porque del año 2018 a 2023 han pasado cinco y este tipo de sanciones prescriben a los tres años».
«Otra cosa es en el ámbito de la jurisdicción penal, que la Fiscalía está investigando los hechos y sí puede existir un delito de corrupción entre particulares en la versión de amaños de ámbito deportivo», añadió Tebas.
El presidente de la patronal indicó que van a esperar «a cómo acaba» esta investigación. «Vamos a respetarla y a esperar si cuando termine la Fiscalía decide interponer la oportuna querella. A partir de ahí, tomaremos la decisión, si hay una querella, evidentemente nos tendremos que personar como acusación particular, y si no la hay, el asunto quedará archivado», detalló.
Además, Josep María Bartomeu, presidente del Barcelona entre los años 2015 y 2020, declaró que es «falso y absurdo» pensar que con los pagos por parte del club azulgrana a la empresa propiedad de Enríquez Negreira se comprara a árbitros.
Bartomeu puntualizó que la relación con el vicepresidente del CTA empezó bajo el mandato de José Luis Núñez y que se mantuvo con Joan Gaspart, Joan Laporta, Sandro Rosell y él mismo.
El Barcelona llegó a pagar siete millones de euros desde 2001 por supuestas asesorías verbales. La investigación que la Fiscalía de Barcelona está llevando a cabo confirmó que estos abonos fueron incrementándose en el último tramo del primer mandato de Laporta.
Requerimiento
Por otro lado, el Departamento de Integridad de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) inició «un requerimiento de información reservada tanto a los responsables del Comité Técnico de Árbitros (CTA) como del Barça».
La RFEF señaló que «tras las elecciones a la Presidencia de la RFEF a finales de mayo de 2018, con la llegada del actual equipo de gobierno, se renovó la cúpula del CTA, cesando a los anteriores directivos, entre los que se encontraba el Sr. Enríquez Negreira».