Un hijo de Zeus al servicio de España

Germán Dueñas Beraiz
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Durante el siglo XVIII fue muy común poner nombres de personajes de la mitología griega a las piezas de artillería

Un hijo de Zeus al servicio de España

La variedad de piezas de artillería es amplísima dependiendo de la época, función, materiales y tipos y tamaños de los proyectiles que disparaban, etc. En este caso tratamos de un mortero, y que por tanto posee unas características muy concretas. En primer lugar disparan bombas, es decir proyectiles metálicos huecos rellenos de un material explosivo. La finalidad era, que tras describir un arco, tiro parabólico, cayeran dentro de una posición fortificada. Para ello la bomba, que era esférica, tenía un orificio por el que se introducía el material explosivo y que se cerraba con la espoleta a golpe de maza. Este elemento permitía explosionar la carga una vez que el proyectil hubiera caído en el interior de la plaza o en su trayectoria por el aire. Estas espoletas eran de madera, estaban perforadas y rellenas de 'mixtura' que era el elemento que transmitía el fuego para que funcionara el sistema. La pólvora se disponía en la recámara de la pieza, y sobre ella se colocaba un taco de madera que la obturaba. Posteriormente se rellenaba con tierra húmeda tamizada para ayudar a asentar el protectil en su posición. La espoleta a veces se prendía antes de realizar el disparo, y en otras ocasiones se iniciaba con el fuego de la pieza al ser disparada.

Se trata de un modelo reglamentario en la artillería española, según la Ordenanza de 1743, que estaba basada en el sistema francés "Le Valliere". Está fundido en bronce con dos partes que van unidas: una es el mortero esferoide en si, y otra una placa con un saliente formando escuadra, denominado diente. El mortero iba colocado en un ángulo de 45 grados sobre dicha base, y de la que recibían su denominación: «morteros de a placa». Estas piezas tenían dos uso principales: el primero servía para asediar plazas fortificadas. Y el segundo ir montadas en barcos de guerra denominados 'bombardas' o 'Reales Bombardas' donde acompañaban a otras piezas con el fin de atacar desde el mar las plazas fortificadas o proteger un desembarco de infantería. Estas piezas a su vez se unían a una cureñas o cajas de madera, (de roble, fresno o álamo negro) donde se embutían y se aseguraban por argollas y fajas metálicas que fijaban ambos elementos. Que a su vez se colocaban sobre tierra o en las naves antes citadas.

Durante el siglo XVIII fue muy común poner nombres de personajes de la mitología griega a las piezas de artillería. El nombre de nuestra pieza, PIRITHOUS, aparece grabado en una tarjeta en la parte superior del tubo. Piritoo fue hijo de Ixion o de Zeus, según algunos autores. El día de su enlace, los centauros fueron invitados al mismo y tras abusar del alcohol, cometieron todo tipo de desmanes con las mujeres presentes en la boda. Esto provocó una guerra que terminó con la derrota de los centauros  y su expulsión de Tesalia. En esta aventura fue acompañado por Teseo, con quien compartió muchas otras posteriormente.  En una de ellas partieron ambos personajes en busca de Perséfone, hija de Zeus, hacia el inframundo, con el fin de desposarse Piritoo con ella. Tras caer en una trampa de Hades, ambos quedaron pegados para siempre allí, aunque Teseo fue rescatado posteriormente por Heracles en el duodécimo trabajo.

Nuestro mortero fue construido en la Real Fundición de Artillería de Barcelona el 20 de agosto de 1778 pesando 85 quintales (3.864 kgr.). Toda esta información se encuentra grabada sobre diferentes partes de la pieza y la placa. Así mismo en el primer cuerpo , sobre el fogón, aparece la cifra del Rey Carlos tercero "CIII" entre una corona de laurel y palmas, superada de corona real. Consta de tres partes diferenciadas y posee dos asas poligonales para su manipulación y transporte, así como de un fogón cerrado para facilitar el disparo.

Teniendo en cuenta su año de fundición y la utilización que de este tipo de piezas se hacía, es probable que se fundiera con el fin de formar parte del amplio tren de artillería terrestre y naval que se utilizó en el asedio de Gibraltar (1779-1783). Este fue el último y más grande de los asedios con fuertes bombardeos que tuvo sobre la citada posición británica.

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