El entrenador del CF Talavera, Manuel Mosquera, declaró tras la victoria por 1-0 ante el SD Logroñés, que era este un partido «a vida o muerte». En este sentido reconoció que durante el encuentro «por momentos se notaba la tensión y en otros hicimos cosas muy buenas, pero, sobre todo, nos agarramos a un tipo de partido en el que había que ganar sí o sí y lo hicimos».

Ahora bien, «luego están los matices». A este respecto, detalló que «tuvimos desajustes en los primeros veinte minutos que nos pudieron costar algún gol». Pero encuadra esta circunstancia en el hecho de que «se sale con una tensión de querer dominar ya a la SD Logroñés». Eso sí, destacó que «nos fuimos agarrando al partido con el paso del tiempo, les tuvimos más o menos donde queríamos, que era en campo contrario».

A partir de ese momento, «hicimos bastantes cosas buenas, no todo con brillantez, pero sí con lo necesario para buscar nuestro momento, nuestro gol y sufrir». En definitiva que la victoria «fue con más o menos brillantez, pero con muchas cosas buena en cuanto a circulación, a recuperar el campo y, sobre todo, lo que más me ha gustado es que intentamos llegar a bandas y pusimos muy buenos centros».

En este punto destacó la recuperación plena de Adighibe, autor del tanto de la victoria: «Hemos recuperado a un jugador inmenso porque ese gol ya sabemos lo que vale». Considera que «es una pena que el Talavera no le haya podido tener durante tanto tiempo». Y aseguró que «tiene unas condiciones de delantero que se ajustan mucho a lo que a mí me gusta». Y, por descontado, «el gol vale por mil en cuanto a su energía propia». Mientras que se refirió Edmilson, al señalar que «es también un futbolista muy necesario para nosotros».

Por otro lado, antes de marcar el 1-0 hubo silbidos por parte de los aficionados; Mosquera considera que «no hacía falta despertarnos, lo que ocurre es que hay que ir rascando el partido». En definitiva, «construimos la victoria con pico y pala».

Junto a esto, el conjunto blanquiazul no encajó en esta ocasión gol en los últimos minutos, uno de sus lastres de la temporada, y eso que se encontró con la dificultad de los siete minutos que añadió el colegiado: «Habría que ver como es el cálculo de los árbitros».

En cuanto a la actitud de su escuadra en la recta final, ensalzó que «el equipo se agarra a estos minutos difíciles en los que ya no ocurre nada». Ahora bien, el Talavera pudo marcar en los últimos instantes, pero «lo que está claro que en el otro lado no; obligamos a unos centros un poco forzados». En opinión del técnico, «en un mismo partido un equipo valiente como el nuestro también supo guardar, situarse con un 5-4-1 y ahí no pasaba nada». Era necesario ya que «nos jugamos la vida».

Por otro lado, el preparador confirmó que Vicente se encuentra bien después de la brecha en la cabeza que sufrió por el choque con un rival. Hay que recordar que el centrocampista tuvo un percance la temporada pasada por un golpe en la cabeza que le llevó a permanecer unos días en la UCI. En esta ocasión, «estaba sangrando, se le abrió la herida y le vino un mareíllo  debido también al calor y al esfuerzo por el partido; pero afortunadamente todo fenomenal».

Este fue un partido de emociones fuertes y así serán los tres que restan de Liga. Mosquera indica a la afición que «se prepare porque va a haber presión y tensión». El próximo partido será en el feudo del Real Unión el sábado a las 19,00 horas: «Primero tres puntos en Irún y veremos lo que pasa».