Talavera ha entrado ya en las semanas de mayor riesgo para los alérgicos debido al incremento de los pólenes de gramíneas, principal alergeno que afecta a un mayor índice de población en este área. Será hasta principios del próximo junio cuando se alcancen los niveles más altos de gramíneas, algo que suele producirse cada año en torno a las Ferias de San Isidro, como indicó a La Tribuna Álvaro Moreno Ancillo, facultativo de Alergia del Hospital General Nuestra Señora del Prado de Talavera y presidente de la Asociación para la Investigación en Alergia y Asma. 

En estos momentos, tal y como informa la Red de Aerobiología de Castilla-La Mancha (AEROCAM) en su página web, comienza el periodo de polinización de gramíneas con niveles medios en la estación de Talavera así como en las de Ciudad Real y Toledo, si bien los niveles irán en aumento en las próximas semanas en toda la región. En lo que respecta al resto de pólenes, Talavera se encuentra en niveles moderados en cuanto a parietaria y alternaria, así como en nivel rojo (alto) en el caso de llantenes. 

Esto, como explicó Moreno Ancillo, «va marcando que las gramíneas van a venir más potentes», ya que se trata de un polen que va en paralelo a la gramínea y que se asocia también a los síndromes de alergia oral a los alimentos vegetales.

El alergólogo remarcó queTalavera «es uno de los sitios donde más pólenes hay, donde se alcazan los niveles más altos y ahora especialmente», puesto que son las fechas en las que la gramínea cobra más fuerza, sobre todo en las próximas dos o tres semanas. A ello se suman las altas temperaturas previstas para estos días, lo que en conjunto «va a favorecer una explosión» de polen de gramíneas con los «peores días» para los alérgicos a las gramíneas hasta la primera semana de junio.

Tras las gramíneas, lo que más alergias provoca en esta zona es el olivo, cuyos niveles más altos se alcanzan a partir de finales de junio; seguido de la arizónica, el plátano de sombra -cuya temporada ya ha pasado- y las quenopodiáceas.

Por todo, Moreno Ancillo recordó la importancia de que los alérgicos sigan con sus tratamientos hasta el mes de julio y que en el caso de aquellos que presenten dudas sobre si sus síntomas se corresponden con alguna alergia o con el Covid acudan a su médico de cabecera.

Sobre esta cuestión, el alergólogo explicó que los síntomas de la variante ómicron y otros procesos víricos se pueden confundir con alguna alergia, si bien al alérgico «no le duele tanto la garganta, tiene más afectación de estornudo, no suele tener tanto dolor de músculos ni de cabeza y desde luego no tiene fiebre», aunque ómicron en ocasiones curse sin ella también. Esta variante del Covid «empieza más con dolor de garganta, congestión y más cuadro catarral y un poco más de sensación de malestar general que el alérgico».

Este año precisamente por el Covid es «un año extraño» puesto que si bien se cree que no será excesivamente malo para los alérgicos, se viene de periodos con mucho uso de mascarilla. «Al quitársela ahora, quizá va a haber ese choque brusco porque antes estábamos muy protegidos al usar mascarilla para todo», explicó el especialista.