«Desde el Consorcio vamos a abrir nuevos caminos para revitalizar el Casco». Así podría resumirse en un par de líneas los objetivos a medio plazo de la entidad y las líneas de actuación que se han tratado esta mañana durante la Comisión Ejecutiva. Pero habría mucho más que añadir porque el Consorcio se ha fijado un ambicioso reto, aumentar la demanda de residentes, rehabilitar zonas del Casco y ayudar a los vecinos para que ganen en calidad de vida con mejoras enfocadas a la accesibilidad, las nuevas tecnologías y otras posibilidades.
El Consorcio presenta un Plan de Rehabilitación «Colaborativa» que se desarrollará hasta 2030 con el que pretende rehabilitar 200 viviendas, una actuación que permitirá a su vez aumentar el número de residentes a través del alquiler o de la compra «a precios asequibles». En este sentido, el gerente de esta institución, Jesús Corroto, explicó que se ha llevado a cabo un profundo análisis para buscar fórmulas de revitalizar el Casco, de poner en línea Toledo «con la nueva Bauhaus europea» y facilitar una «rehabilitación y regeneración democrática» en esta ciudad patrimonial.
Para ello, el programa estratégico, llamado Coopera, plantea recuperar y poner en uso edificios del Casco en desuso o abandonados en colaboración con los propietarios. De esta manera, la institución se encarga de crear nuevas viviendas aprovechando la experiencia del Consorcio en la mejora de espacios residenciales desde hace veinte años.
En esta línea, la idea es llegar a acuerdos con los propietarios y compensarles con nuevas viviendas a cambio de sus edificios garantizando que no hay pérdida patrimonial. Por tanto, con el resto de viviendas finalistas que quedan se formaría una bolsa de alquiler o venta «para hacer frente a la demanda real». De esta manera, se podrían alcanzar las 200 viviendas para ir fijando nueva población en nueve años.
Por otra parte, el Consorcio también continuará destinando subvenciones a los propietarios que necesiten mejorar sus condiciones de habilitabilidad, con lo que se están elaborando unas nuevas bases reguladoras para que se ajusten a mejoras de accesibilidad, de tecnología y de carácter patrimonial. Corroto añadió que la institución tiene que seguir «a buen ritmo» en esta vía, puesto que ya ha destinado 800.00 euros a 142 expedientes tramitados por propietarios para cambiar ventanas, canalones, y realizar actuaciones en tejados y fachadas, entre otras intervenciones.
proyecto innovador. El tercer objetivo trazado por el Consorcio busca el incremento poblacional del Casco con residentes temporales. Para ello, el gerente del Consorcio anunció otra estrategia para contar con la complicidad «de las entidades consorciadas» en relación a los edificios públicos del Estado, la Junta, la Diputación y el Ayuntamiento cerrados y sin uso. En este caso, el objetivo también es su puesta a punto para convertirlos en residencias de investigadores, de estudiantes, de trabajadores digitales o de otros colectivos con la intención de cubrir esa otra demanda residencial que no es definitiva.